Las patatas fritas son uno básico tanto porque gustan a todos como por el hecho que quedan bien con cualquier plato. ¿Quién puede resistirse a unas buenas patatas fritas? De hecho, hay recetas que exigen unas patatas fritas y de no ser así el plato queda vacío, triste y sin este toque que lo haría irresistible. Imposible comerse un filete sin su ración de patatas a su lado, para no hablar de aquel huevo frito que pide a gritos que se rompa la yema solo con una patata frita. Sí, es posible hacer patatas fritas sin aceite utilizando varios métodos que resultan en un plato más saludable. Aquí te dejamos algunas opciones para que tomes nota.

Hacer patatas fritas sin aceite

Al horno

Los ingredientes con este método son las patatas, sal y especias al gusto. Las instrucciones para la elaboración son, en primer lugar, precalentar el horno a 200 °C. Lavar y pelar las patatas, si lo prefieres, después cortarlas en tiras delgadas. Colocar las tiras de patata en una bandeja para hornear forrada con papel pergamino. Empolvar sal y las especias preferidas sobre las patatas. Hornear durante 20-30 minutos, recorriéndolas a la mitad del tiempo, hasta que estén doradas y crujientes.

Patatas fritas sin aceite / Foto: Freepik

Con la freidora de aire

Los ingredientes con este método son las patatas, sal y especias al gusto. El primer paso consiste en precalentar la freidora de aire a 180 °C. Lavar y pelar las patatas, si lo prefieres, después cortarlas en tiras delgadas. Colocar las tiras de patata en la cesta de la freidora de aire en una sola capa. Empolvar sal y las especias preferidas sobre las patatas. Cocinar durante 15-20 minutos, agitando la cesta a la mitad del tiempo, hasta que estén doradas y crujientes.

Tres técnicas diferentes de hacer patatas fritas sin aceite: al horno, freidora de aire y al microondas

Al microondas

Finalmente, seguimos evitando el aceite, utilizando solo patatas, sal y especias al gusto. Las instrucciones en este caso son lavar y pelar las patatas, si lo prefieres, después cortarlas en rodajas muy delgadas (puedes utilizar una mandolina para más precisión). Colocar las rodajas de patata en un plato apto para microondas forrado con papel pergamino, sin que se superpongan. Empolvar la sal y las especias preferidas sobre las rodajas. Cocinar en el microondas a alta potencia durante 3-5 minutos, observando de cerca para evitar que se quemen. El tiempo exacto puede variar dependiendo del microondas y el grosor de las rodajas.

Cada uno de estos métodos te permitirá disfrutar de unas patatas fritas, crujientes y deliciosas sin necesidad de añadir aceite, convirtiéndolas en una opción mucho más saludable.