Los calçots son una tradición catalana que cada año reúne a familias y amigos en auténticas calçotadas al aire libre. Pero, ¿qué pasa cuando alguien en Madrid quiere disfrutar de este manjar sin tener una parrilla a mano? La influencer madrileña @andreaomevoy ha encontrado la solución y ha compartido su truco en Instagram: hacer los calçots al horno y acompañarlos con una salsa romesco casera. Su publicación ha generado todo tipo de comentarios, y ella misma ha preguntado a sus seguidores: “¿Me aprobáis?”. La receta, aunque adaptada a una cocina sin fuego directo, mantiene la esencia de este plato tan querido en Catalunya. Un homenaje gastronómico que demuestra que no hay fronteras para la buena comida.

Una influencer madrileña se atreve con los calçots al romesco

Para preparar los calçots en casa, Andrea sigue un proceso sencillo. Primero, los pela y corta la base, eliminando las capas más duras. Después, los coloca en una bandeja con una rejilla encima y los hornea hasta que la parte exterior quede tostada y el interior, tierno y jugoso. Mientras los calçots están en el horno, se dedica a preparar la salsa romesco. Elaborarla desde cero es clave para conseguir el sabor auténtico. Asa tomates y ajos, y en un mortero machaca almendras, pan y carne de ñora. Luego, lleva la mezcla a la túrmix con los tomates y ajos asados, aceite de oliva y sal, batiendo hasta conseguir una textura cremosa.

La clave es hacer la salsa desde cero / Foto: Unsplash
La clave es hacer la salsa desde cero / Foto: Unsplash

Elaborar la salsa desde cero es la clave para conseguir el máximo sabor

El resultado es un plato lleno de sabor que mantiene el espíritu de la calçotada. Aunque no hay fuego ni brasas, el truco del horno consigue una textura muy similar. Una vez listos, los calçots se pelan con las manos, se sumergen en la salsa y se disfrutan al estilo tradicional. En los comentarios de su vídeo, muchos seguidores han aplaudido la iniciativa, mientras que otros han señalado que la experiencia nunca será igual sin una parrilla y un babero para evitar mancharse con la romesco. Aun así, varios usuarios han compartido que han probado la receta en casa y han quedado sorprendidos con el resultado.


Más allá de la polémica, lo cierto es que la propuesta de Andrea ha conseguido acercar esta delicia a quienes no tienen la posibilidad de hacer una calçotada tradicional. Una muestra de que la cocina está hecha para innovar y adaptar recetas sin perder su esencia. ¿Será esta la mejor alternativa para disfrutar de los calçots fuera de Catalunya? Para quienes viven en ciudades sin acceso fácil a una barbacoa, sin duda, es una opción deliciosa. Lo importante es mantener el ritual: untar, saborear y, por supuesto, disfrutar en buena compañía.