La carne rebozada es un plato clásico que gusta a pequeños y grandes, ideal para cualquier ocasión. Con una capa exterior crujiente y un interior tierno, siempre resulta una opción deliciosa que conquista los paladares. Es una preparación sencilla, pero sabrosa, y combina a la perfección con una gran variedad de acompañamientos, desde patatas fritas hasta ensaladas frescas. Aunque la carne rebozada es un plato tan apreciado, conseguir el rebozado perfecto puede ser una tarea complicada. La clave está en el hecho de conseguir que el recubrimiento sea lo suficiente crujiente sin perder la jugosidad del relleno, un equilibrio que requiere tiempo y paciencia.
El ingrediente secreto para mejorar la carne rebozada
El rebozado es una de las técnicas culinarias clásicas que no falla un día en el que no sabes qué cocinar y quieres salir rápidamente del paso. En un abrir y cerrar de ojos se prepara este primero o segundo plato que es óptimo para comidas del día a día, familiares o con amigos, como para ocasiones especiales. Para conseguir su característico recubrimiento crujiente, solo hay que utilizar ingredientes básicos como pan rallado, huevo y harina, este último solo en algunos casos. Estos elementos se combinan para formar una capa dorada y crujiente que envuelve la carne, mientras que el interior se mantiene jugoso y tierno.
El empanado no solo se aplica a filetes de carne, sino también en el pescado, pollo y algunas verduras. Aunque la receta básica es bastante sencilla, conseguir el empanado perfecto implica prestar atención a detalles como la temperatura del aceite y el tiempo de cocción, para conseguir este contraste ideal entre aquello crujiente del exterior y la suavidad del interior. Este plato, tan versátil y delicioso, es sinónimo de confort y sabor, y ha conquistado los corazones de muchas generaciones.
En lugar del perejil y el pimentón, se puede optar por añadir un poco de ajo en polvo al pan rallado para que se mezcle y aporte el sabor en la carne
El truco desconocido para mejorar la carne rebozada
Así y todo, para que la carne rebozada esté todavía más deliciosa, se pueden añadir hierbas aromáticas al pan rallado. Las más comunes a los fogones de nuestras casas son el perejil y pimentón. El ajo en polvo se elabora a partir de ajo deshidratado y triturado. Es una de las especias más habituales a las cocinas catalanas y realmente puede cambiar el sabor del filete rebozado que hasta ahora conocíamos. Solo hay que añadir un poco de ajo en polvo al pan rallado para que se mezcle y aporte el sabor en la carne, que generalmente es de ternera o pollo. El resto del proceso es bien conocido. Además del ajo en polvo, se pueden utilizar otras especias como cebolla en polvo, cúrcuma, curri, tomillo o comino. Sin importar la opción final escogida, el filete empanado adquirirá un sabor más único y original.