Al menos una vez en la vida todos nos preguntamos cómo dejar de llorar con las cebollas. ¿Cuántas veces te ha pasado que estás picando una cebolla muy fina para preparar el sofrito perfecto y terminas llorando como un niño que se ha caído del columpio? Seguro que muchas veces. Este fenómeno químico se produce porque los ojos se protegen de forma natural de las sustancias irritantes que hay dentro de la cebolla. Ahora que hemos identificado el problema, ha llegado el momento de averiguar cómo cortar la cebolla sin llorar.
Al menos una vez en la vida todos se nos preguntamos cómo dejar de llorar con las cebollas
¿Por qué cortar cebolla hace llorar?
Para empezar por el principio, es preciso entender por qué cortar cebolla nos hace llorar. La ciencia explica que las cebollas absorben mucho azufre, que utilizan para producir diferentes aminoácidos. Cuando cortamos la cebolla, sus moléculas se rompen y se producen una serie de reacciones químicas que generan una sustancia volátil llamada sulfóxido de tiopropanal. Se trata de un agente lacrimógeno, que es precisamente el responsable de la sensación de escozor en los ojos y, en consecuencia, de nuestras lágrimas. Se ha comprobado que algunos tipos de cebollas, en general las más dulces, absorben menos azufre y, por lo tanto, tienden a producir menos irritación. Sigue leyendo para conocer cuáles son los trucos para evitar esta incómoda sensación.
Trucos para dejar de llorar al cortar cebolla
1. El agua
El primer truco para cortar cebollas sin llorar es pelar la cebolla, partirla por la mitad y sumergirla en agua fría unos minutos. Saca la cebolla del agua, sécala y córtala. ¡Verás como no lloras!
2. El cuchillo
El cuchillo con el que se corta la cebolla es fundamental para no llorar. Humedece bien la hoja con agua antes de cortar la cebolla. Asegúrate de que el cuchillo esté bien afilado, de esta forma podrás cortar la cebolla más rápido sin que emita sus sustancias irritantes. Procura no cortarte porque en ese caso ningún truco impedirá que llores.
3. El vinagre
El vinagre también es un aliado estupendo contra las lágrimas de la cebolla. Pela la cebolla y sumérgela en una fuente llena de vinagre blanco durante 10 minutos. Pasado este tiempo en remojo, saca la cebolla, sécala con papel de cocina y córtala tranquilamente.
4. El frío
Las sustancias irritantes de la cebolla pierden potencia si esta última está muy fría. Mete la cebolla en el congelador durante 5 minutos o en el frigorífico durante 10 minutos y verás como no lloras más.
5. Las gafas
En América han modificado las cebollas genéticamente para que no hagan llorar. Pero si te encantan las cebollas de tu huerto o de tu frutería de confianza, tendrás que comprarte unas gafas para pelar cebolla. Póntelas cuando vayas a cortarla si no te apetece llorar.