Cuando vas al supermercado, es difícil resistirse a comprar patatas en grandes cantidades. Normalmente, se venden en sacos de varios kilos, y la diferencia de precio entre comprarlas sueltas y en bolsa es considerable. Así que, como buenos estrategas del ahorro, casi todos acabamos llevándonos la opción más grande, porque, al fin y al cabo, las patatas nunca sobran. Son un básico en cualquier cocina: con ellas puedes improvisar una cena rápida, preparar una guarnición perfecta o salvarte de un apuro cuando no tienes nada más en la nevera.

El lugar correcto donde debes guardar las patatas para evitar que broten

Sin embargo, por muy imprescindibles que sean, a todos nos ha pasado lo mismo: algunas patatas se quedan olvidadas en la despensa. Y cuando por fin las encuentras, han empezado a brotar o están demasiado blandas para usarlas. Entonces llega el momento de preguntarse: ¿cómo podemos conservarlas mejor para que duren más tiempo?

Existen las patatas azules / Foto: Unsplash
Variedades deliciosas de patatas / Foto: Unsplash

Mantener las patatas frescas por mucho más tiempo parece algo imposible. Además, solemos echar la culpa a la calidad del producto y pensar que por haber adquirido las más baratas estamos pagando ahora el error tirando la mitad de la bolsa. Pero no, la calidad de las patatas no afecta en que estas se pongan blandas antes o broten como si las regásemos todos los días.

Las patatas brotan porque, al ser un tubérculo, están diseñadas para seguir creciendo incluso después de ser cosechadas. Cuando se almacenan en ambientes cálidos, húmedos o con luz, activan su proceso natural de germinación, desarrollando esos característicos brotes. Además, liberan un gas llamado etileno, que acelera aún más este proceso. Aunque los brotes no significan que la patata esté en mal estado de inmediato, pueden afectar su textura y sabor, además de indicar que sus nutrientes se están consumiendo para alimentar el nuevo crecimiento.

El frigorífico se vuelve a posicionar como el rincón de la casa en el que las patatas pueden mantenerse en perfectas condiciones más tiempo

Ni despensas, ni sitios oscuros, ni lugares apartados. El frigorífico se vuelve a posicionar como el rincón de la casa en el que las patatas pueden mantenerse en perfectas condiciones más tiempo. Aunque durante años se ha dicho que guardar las patatas en la nevera era un error, nuevos estudios han puesto en duda esta creencia. La razón por la que tradicionalmente se desaconsejaba refrigerarlas es que el frío transforma parte del almidón en azúcar, lo que podría afectar su sabor y textura. Sin embargo, este cambio es mínimo y, en la práctica, almacenar las patatas en el frigorífico puede ser una gran ventaja.

patatas
Cestas llenas de patatas / Foto: Unsplash

En un ambiente fresco y estable, como el que ofrece la nevera, las patatas se conservan firmes durante más tiempo y se retrasa la aparición de brotes. Además, se evita la humedad excesiva o el contacto con otros alimentos que aceleran su deterioro, como las cebollas o los ajos. Así que, si siempre has pensado que la despensa era el mejor sitio para guardarlas, quizás sea el momento de reconsiderarlo.

No todo vale

Para que las patatas se conserven en perfectas condiciones dentro del frigorífico, no basta con meterlas sin más en el cajón de las verduras. Hay algunos trucos sencillos que pueden marcar la diferencia y ayudarte a prolongar su frescura:

  • En bolsas de papel o tela: nada de plásticos ni recipientes herméticos. Las patatas necesitan respirar, así que lo ideal es guardarlas en bolsas de papel o de tela que permitan la circulación del aire y eviten la acumulación de humedad.
  • Lejos de ciertos alimentos: aunque es tentador colocar las patatas junto a las cebollas o los ajos, este es uno de los mayores errores. Estos alimentos liberan etileno, un gas que acelera la germinación y hace que las patatas broten antes de tiempo. También es mejor mantenerlas alejadas de frutas como plátanos o manzanas, que tienen el mismo efecto.
  • En un espacio seco y sin humedad: dentro de la nevera, el cajón de las verduras suele ser la mejor opción, ya que mantiene una temperatura estable y evita que las patatas absorban olores de otros alimentos. Si notas que se acumula humedad, coloca un trozo de papel de cocina en la bolsa para absorber el exceso y evitar que se reblandezcan.

Siguiendo estos sencillos consejos, las patatas podrán mantenerse en perfecto estado durante semanas sin brotar ni perder su firmeza, listas para ser usadas en cualquier receta cuando las necesites.