Si eres amante de los gofres, pero no siempre tienes tiempo para preparar una tanda desde cero, tenemos la solución perfecta para ti: prepara la masa con antelación, guárdala en moldes de cupcakes de silicona y congélala. De esta manera, siempre tendrás porciones listas para disfrutar de unos gofres deliciosos en tan solo tres minutos.
Preparar gofres en tres minutos
El primer paso es preparar una masa de gofres tradicional. Necesitarás:
- 2 tazas de harina de trigo
- 2 cucharadas de azúcar
- 1 cucharada de polvo de hornear
- 1/2 cucharadita de sal
- 2 huevos
- 1 3/4 tazas de leche
- 1/2 taza de mantequilla derretida
- 1 cucharadita de extracto de vainilla
En un bol grande, mezcla los ingredientes secos: harina, azúcar, polvo de hornear y sal. En otro bol, bate los huevos con la leche, la mantequilla derretida y la vainilla. Une ambas mezclas hasta obtener una masa homogénea.
Vierte la masa en moldes de cupcakes de silicona, llenándolos hasta tres cuartos de su capacidad. Estos moldes son ideales porque facilitan el desmoldeo una vez que la masa esté congelada. Coloca los moldes en el congelador durante unas horas hasta que la masa esté completamente sólida. Cuando estén congelados, retira las porciones de los moldes y guárdalas en bolsas herméticas para congelador. Así, tendrás porciones individuales listas para usar en cualquier momento.
Cuando desees disfrutar de unos gofres rápidos, simplemente saca una porción de masa congelada. No es necesario descongelarla previamente. Precalienta tu gofrera y coloca la porción directamente sobre la placa caliente. Cocina durante tres minutos o hasta que los gofres estén dorados y crujientes por fuera. Esta técnica no solo ahorra tiempo, sino que también permite experimentar con diferentes sabores. Puedes agregar chips de chocolate, arándanos, trozos de nueces o especias como canela o nuez moscada a la masa antes de congelarla. Así, tendrás variedad sin esfuerzo adicional.
La solución perfecta para tener gofres siempre a tu disposición
Asegúrate de etiquetar las bolsas con la fecha de preparación para controlar la frescura. La masa congelada puede durar hasta tres meses sin perder calidad. Para un toque extracrujiente, deja los gofres un minuto adicional en la gofrera. Si deseas gofres más esponjosos, añade una pizca de bicarbonato de sodio a la masa antes de congelarla. Con este método, disfrutar de gofres caseros, frescos y deliciosos nunca ha sido tan fácil y rápido. Perfecto para desayunos improvisados o meriendas irresistibles.