Cocinar beicon en el horno es uno de los métodos más eficaces para conseguir ese crujiente perfecto sin el desorden de la sartén. Además, te permite cocinar grandes cantidades de una sola vez y con menos esfuerzo. Si eres un amante del beicon crujiente, sigue leyendo para descubrir el mejor truco que te ayudará a lograr una textura impecable cada vez que uses el horno.
El mejor truco para cocinar beicon en el horno
Cocinar beicon en el horno ofrece muchas ventajas. En primer lugar, permite una cocción uniforme, lo que asegura que cada tira quede dorada y crujiente por igual. A diferencia de la sartén, donde el beicon puede retorcerse y cocinarse de manera desigual, el horno distribuye el calor de manera más pareja. Además, el beicon no queda empapado en su propia grasa, lo que ayuda a conseguir ese acabado crujiente.
El truco definitivo para lograr un beicon extracrujiente en el horno es usar una rejilla de alambre sobre una bandeja para hornear. Colocar el beicon sobre la rejilla permite que la grasa se escurra mientras se cocina, evitando que las tiras queden encharcadas en su propia grasa. Esto asegura que se cocinen de manera uniforme y queden mucho más crujientes.
Cocinar beicon en el horno te permite preparar grandes cantidades de una sola vez y con menos esfuerzo
Pasos para cocinar beicon crujiente en el horno usando una rejilla
En primer lugar, debes precalentar el horno a 200 °C. Esta temperatura permite que el beicon se cocine rápidamente y que los bordes queden crujientes. Ahora, prepara la bandeja de horno. Forra una bandeja para hornear con papel de aluminio. Esto facilitará la limpieza posterior, ya que recogerá toda la grasa que se escurra del beicon.
Posteriormente, coloca la rejilla de alambre encima de la bandeja preparada. La rejilla elevará el beicon para que el aire circule por todos lados, y así no quede empapado en su propia grasa. Una vez hecho, coloca las tiras de beicon sobre la rejilla en una sola capa, asegurándote de que no se toquen entre sí. Esto permitirá que se cocinen de manera uniforme y que cada tira quede crujiente. Ahora toca hornear. Pon la bandeja en el horno y cocina el beicon durante 15-20 minutos, dependiendo de la cantidad de crujiente que prefieras. Revisa el beicon a los 12 minutos para evitar que se queme, ya que algunas tiras pueden cocinarse más rápido que otras. Una vez cocinado, retira y deja reposar para colocarlo colócalo sobre papel absorbente para eliminar el exceso de grasa.
Por último, unos consejos adicionales. Si prefieres un beicon más crujiente, puedes dejar las tiras en el horno unos minutos extra, pero vigílalas de cerca para que no se quemen. Al usar la rejilla, te asegurarás de que el beicon quede crujiente por ambos lados sin necesidad de voltearlo a mitad de cocción. Si te gusta experimentar, puedes espolvorear el beicon con un poco de azúcar moreno o pimienta negra antes de hornearlo para darle un toque especial.