Llegó el momento en el que una hamburguesa ya no podía crecer más. Cada vez eran más abultadas, con más cantidad de carne y mil y un ingredientes que la convertían en una bomba complicada de comer y de digerir. La de muchos gramos y mucha maduración era la más reclamada. Parecía el sumun de las hamburguesas. La perfección. La de diez. Pero han llegado las smash burgers decididas a desbancarla y va camino de conseguirlo. Pero, ¿por qué estas hamburguesas se han vuelto tan populares y qué las hace tan especiales?
La nueva moda de las 'smash burgers'
Por si alguien acaba de llegar de Marte y todavía no sabe lo que son vamos a traducir el término. Se nos queda 'hamburguesas aplastadas' y poco más hay que decir. Al elaborarla simplemente se aplasta la carne contra la parrilla para que quede mucho más fina. El resultado es una superficie más dorada y crujiente. Y esto, aunque parezca tan sencillo, es pura química y se debe a la "reacción de Maillard". Cuando un alimento se calienta sus propiedades cambian.
Entre las reacciones que sufre la hamburguesa encontramos la que provoca que las proteínas y los azúcares presentes en los alimentos se caramelicen. Aparece así la costra dorada y crujiente tan característica de las smash burgers. Por su puesto, esto ocurre con las tradicionales de la misma forma, pero al tener menos superficie y mucha parte interior, el resultado no es tan evidente ni tan gustoso.
Hoy, hasta las hamburguesas son delgadas, compactas y firmes. Eso sí, su corazón sigue siendo jugoso y su sabor inconfundible. Esa mezcla de texturas y cocciones es parte de su éxito. En los restaurantes también han acogido esta moda con los brazos abiertos, ya que se cocinan más rápido y más sencillo acertar con el punto, por lo que siempre aciertan. Eso sí, esta hamburguesa es tan versátil como todos sus parientes, puesto que acepta todos esos ingredientes extras que siempre acompañan a la carne. Desde el imprescindible queso o la lechuga y el tomate a otros más gourmets como la cebolla caramelizada, quesos especiales, aguacate, encurtidos, huevo… o lo que tu imaginación invente en cada momento.
Me declaro fan
Me declaro fan, primero porque aquí no hay que tratar ese tema tan peliagudo que es hablar del punto de la carne. No puedo con la hamburguesa sangrienta (en Halloween tampoco). Por el contrario, las smash burgers siempre están en su punto. Doradas por fuera y jugosas por dentro. ¿Te sumarás a la moda de las smash burgers? Yo ya lo hice, y no puedo esperar a seguir experimentando con estas hamburguesas irresistibles.