Si tienes utensilios de madera en la cocina, ya te puedes ir despidiendo de ellos. Los expertos recomiendan no utilizar este tipo de herramientas por el riesgo que suponen para la salud. La madera es un material poroso en el cual se pueden instalar bacterias que, a la larga, pueden proliferar y causar enfermedades graves a las personas que ingieran comida que haya estado en contacto con la superficie de estos utensilios. Desde espátulas hasta tablas de cortar, las herramientas de madera sin el tratamiento adecuado, en la cocina, no se tendrían que utilizar.
Según algunos expertos, como la doctora en química y divulgadora científica Deborah García Bello, o la biotecnóloga Gemma del Caño, los utensilios de madera sin tratamiento adecuado pueden suponer, a la larga, un riesgo para la salud. Es importante tener en cuenta que el peligro no es la madera, si no las bacterias que allí puedan proliferar (igual que proliferan en trapos, esponjas u otros utensilios con humedad).
Después de leer esto dirás adiós a las espátulas de madera, las bayetas viejas y los estropajos que llevan en tu vida más de dos semanas...
— Deborah García Bello (@deborahciencia) December 16, 2021
Hilo 👇🏻 pic.twitter.com/AE3bI5ayj8
Un riesgo para la salud
Los utensilios de madera en la cocina, como las espátulas, los cucharones o las tablas de cortar, son potenciales fuentes de enfermedades. Como se trata de un material poroso, los minúsculos espacios que deja la madera en sus grietas microscópicas son el lugar preferido de las bacterias para formar colonias. Colonias que, si proliferan y entran en contacto con los alimentos que consumimos, pueden provocar listeriosis, botulismo o salmonela, entre otras enfermedades. Se trata de un problema muy serio en la industria alimentaria y que, a una escala más pequeña, también nos tendría que preocupar en nuestros hogares.
Los utensilios de madera más modernos vienen protegidos con capas extra de seguridad que evitan la proliferación de bacterias
La mejor alternativa es sustituir los utensilios de madera por utensilios de acero inoxidable o silicona. Se trata de materiales más seguros porque no son porosos y porque resisten igualmente las altas temperaturas en la cocina. Las herramientas de madera no son directamente peligrosas, pero a la larga pueden ser un perfecto caldo de cultivo de bacterias. No obstante, si no quieres renunciar a la madera en la cocina, tienes alternativas seguras. Los utensilios hechos de nogal, olivo o bambú son más resistentes y bactericidas. Pero además, los utensilios de madera más modernos vienen protegidos con capas extra de seguridad que evitan la proliferación de bacterias.
El límite de uso de la madera
Con una correcta desinfección y limpieza de los utensilios de madera, en teoría, el riesgo de contaminación bacteriana tendría que ser muy pequeño. Pero por muy bajo que sea, es un riesgo que siempre existe y que no podemos controlar. Por muy limpio que creamos que está un utensilio, a escala microscópica puede tener bacterias. Pero si hay un momento en que tenemos que sustituir las herramientas de madera sí o sí es cuando aparece la bio-película. Se trata de una fina y viscosa capa de bacterias que, a causa del avanzado estado de proliferación de la colonia, ya es perceptible para los humanos. No a simple vista, pero sí al tacto. Si notas que tus utensilios de cocina, ya sean de madera, pero también bayetas o trapos, tienen una textura viscosa que no se marcha con nada, es momento de tirarlos.
🪵La madera es porosa, se astilla, retiene humedad, por eso no conviene tener 🍴🥄utensilios de cocina de madera.
— Deborah García Bello (@deborahciencia) December 16, 2021
En este punto, las bacterias han formado una colonia resistente organizada de manera muy eficiente. Las bacterias anaerobias (los que no necesitan oxígeno) se sitúan en las capas inferiores, mientras que las aerobias (los que necesitan oxígeno) se ponen en las capas superficiales. Una simbiosis que hace que la colonia ya no se pueda limpiar de ninguna manera y requiera la sustitución del utensilio. Consumir alimentos que hayan estado en contacto con la bio-película conlleva serios riesgos para la salud.