Los postres de músico, hechos con una combinación de frutos secos y un porrón de moscatel, son unos postres exquisitos muy típicos para acabar un desayuno de tenedor. Y para poder preparar esta sencilla elaboración de nuestro recetario tradicional, conviene tener claro qué ingredientes tenemos que utilizar para preparar un músico. Esto es lo que dicen los entendidos en la materia.
Pistachos en el músico: ¿sí o no?
Según la Gastroteca—basada en el Corpus de la Cuina Catalana— y la Fundació Institut Català de la Cuina y la Cultura Gastronòmica, los postres de músico se hacen sin pistachos. Los ingredientes que indican ambas fuentes son los siguientes:
- 50 g de pasas
- 50 g de almendras tostadas
- 50 g de avellanas tostadas
- 50 g de higos secos
- 50 g de nueces peladas
Todo regado, evidentemente, con un poco de moscatel. Hay sitios que sirven un chupito y otros que dejan un porrón pequeño. Pero sea cual sea el recipiente, lo más importante es que el moscatel no falte. Y quien dice moscatel dice cualquier otro vino dulce; pero lo más típico es servir moscatel.
Ninguna norma escrita
En realidad, por mucho que las instituciones de referencia de la cocina catalana redacten la receta de postres de músico sin los pistachos, si tienes y te gustan, ponlos. La gracia de estos postres es servir frutos secos con vino dulce; da igual si solo son avellanas o si haces un surtido de veintisiete frutos secos diferentes. Y si en vez de vino dulce solo tienes cassís o ratafía, también estará bien. Cada receta se hace diferente en función de qué hogar lo elabore. Por lo tanto, al músico, aunque tradicionalmente no se pongan, le puedes añadir pistachos.
No se trata de un surtido de frutos secos mezclados, sino que cada puñado es de un solo tipo de fruto seco
Otra fuente que describe los postres de músico sin pistachos es Taste Atlas, un portal gastronómico que recoge recetas de todos los rincones del mundo. Un detalle importante que destaca Taste Atlas de este plato es que los frutos secos se suelen servir separados los unos de los otros. Es decir, no se trata de un surtido de frutos secos mezclados, sino que cada puñado es de un solo tipo de fruto seco. El portal comenta también el origen del nombre del plato, que radica en la época en que los músicos de calle comían frutos secos entre actuaciones porque no tenían tiempo de ir a hacer una comida completa. Un origen curioso que ha dado lugar a la elaboración de hoy día. Los postres de músico son, seguramente, el plato de la cocina catalana más fácil de hacer, tanto si pones pistachos como si te ciñes a la elaboración tradicional.