Los plátanos son una de las frutas preferidas de nuestro país. Las Islas Canarias son uno de los mayores productores del mundo y, a la hora de comprar, nadie duda de que los mejores tienen ese sello tan reconocible que nos llega desde el archipiélago canario. Pero a pesar de que se trate de una fruta muy común en todos los hogares, el desayuno no suele ser uno de los momentos preferidos para consumirlo, algo que, al igual que muchos expertos, creo que debería cambiar.
Un plátano al día
Hay muchas razones para que esa fruta amarilla con manchitas negras esté siempre presente en nuestra cocina. Los plátanos contienen vitaminas y minerales esenciales, como la vitamina C, la vitamina B6, el potasio y el magnesio. Estos nutrientes desempeñan roles cruciales en funciones como el sistema inmunológico, la salud del corazón y el mantenimiento de la presión arterial.
Cada día son más estudios lo que corroboran que el plátano está cargado de beneficios para la salud. Recientemente, el International Journal of Environmental Research and Public Health destacó la relación entre el consumo de plátanos y una correcta presión arterial, siendo muy recomendable su consumo a personas con hipertensión. Pero también hay otras investigaciones que sitúan a ciertos nutrientes del plátano como los responsables de una microbiota sana y equilibrada, por lo que es ideal para personas con problemas digestivos.
¿A qué hora del día?
A todos estos beneficios hay que sumar aquellos que son más acentuados por las mañanas. Para mí, uno de los más importantes es lo fácil y cómodo que es de preparar. No necesitas manchar ningún cubierto ni preparación previa al mordisco. El plátano no necesita ni un lavado, por lo que es también perfecto para esos días con prisas en los que metes algo en el bolso para consumirlo después.
Seguimos destacando que se trata de una fruta muy saciante. Así, con un plátano logramos un buen chute de energía y que esta no dure gran parte de la mañana. Otro aspecto importante es su contenido en triptófano. Se trata de un aminoácido que colabora en la liberación de serotonina. Sí, la conocida como hormona de la felicidad. Así, un plátano nos llena de energía, pero también de buen rollo. Todo lo que necesitas para afrontar el día con mejor talante. Una ventaja más del plátano es que están presentes y deliciosos todo el año. Y es que, cuando se crea una rutina, es un fastidio tener que cambiarla o amoldarla a las diferentes temporadas. Los plátanos siempre están disponibles y con el mismo sabor.
Tres ideas para amar todavía más al plátano
Si te parece aburrido el hecho de comer siempre lo mismo, aquí van tres propuestas con plátano para que puedas variar (si quieres) y amar todavía más al plátano.
Tostadas con crema de cacahuete
Elige una buena rebanada de pan integral y úntala con crema de cacahuete. Parte unos trozos de plátano encima y espolvorea con algunas semillas como sésamo. Tendrás un extra de sabor y también de energía. Ideal para esas mañanas que sabes que se van a hacer largas.
Smoothie
La ventaja de un batido con plátano es que admite cualquier tipo de bebida vegetal sin perder la consistencia típica de estas bebidas. Queda ideal con bebida de almendra y más todavía si añades un poco de canela al final.
Bizcocho exprés
El plátano aportará ese toque dulce a la repostería que necesitas cuando quieres eliminar el azúcar. Para este “mugcake” necesitas: un plátano maduro, un huevo, 60 gramos de harina de avena, una pizca de levadura y otra de canela. Mezcla todo bien en una taza grande y en solo minuto y medio en el microondas tendrás un bizcocho delicioso, saludable y lleno de energía.