La carne picada cruda es un ingrediente común en platos como el steak tartar o ciertos tipos de carpaccio. Sin embargo, consumirla cruda con frecuencia puede conllevar riesgos para la salud. Este tipo de carne es más susceptible a la contaminación bacteriana y parasitaria, y comerla sin cocinar puede exponer a quienes la consumen a diversos problemas.

Comer carne picada cruda a menudo

Uno de los principales riesgos de comer carne picada cruda es la exposición a bacterias dañinas. Las bacterias como Escherichia coli, Salmonella, y Listeria pueden encontrarse en carne cruda, especialmente si el proceso de manipulación y almacenamiento no es adecuado. Estas bacterias suelen encontrarse en la superficie de la carne, pero cuando se pica, la superficie expuesta aumenta, permitiendo que las bacterias se distribuyan por toda la carne. Consumir carne cruda frecuentemente aumenta el riesgo de infecciones bacterianas que pueden causar síntomas como diarrea, dolor abdominal, fiebre y vómitos.

olga drach Ybm5I2p3wNY unsplash
Carne cruda / Foto: Unsplash

Infección por parásitos

Además de bacterias, la carne picada cruda puede contener parásitos como Toxoplasma gondii, Trichinella spiralis, y otros que se encuentran comúnmente en carne cruda o poco cocida. El Toxoplasma gondii, por ejemplo, es un parásito que puede causar toxoplasmosis, una infección que en personas sanas suele ser leve, pero en personas con el sistema inmunitario debilitado puede provocar síntomas graves. Comer carne picada cruda con frecuencia también puede aumentar el riesgo de contraer triquinosis, una infección parasitaria que causa dolor muscular, fiebre y otros síntomas.

La carne picada cruda puede contener ciertos parásitos

Riesgo de intoxicación alimentaria

La carne picada cruda puede también aumentar las probabilidades de sufrir una intoxicación alimentaria, especialmente si no se ha refrigerado adecuadamente. Las bacterias en la carne cruda pueden proliferar si esta no se conserva a bajas temperaturas, y el consumo frecuente de carne cruda podría aumentar la exposición a toxinas bacterianas que causan vómitos, diarrea y otros síntomas gastrointestinales.

nils b 4nDCyR9 R0A unsplash
En el carpaccio la carne cruda es protagonista / Foto: Unsplash

Aunque la carne cruda conserva ciertos nutrientes que se pierden con la cocción, consumirla cruda regularmente puede interferir con la absorción de nutrientes como proteínas y ciertas vitaminas. La cocción ayuda a descomponer las proteínas y otros compuestos, facilitando su digestión y absorción. Comer carne cruda puede, en algunos casos, dificultar el aprovechamiento de estos nutrientes, especialmente en personas con problemas digestivos. Como ves, consumir carne picada cruda de forma habitual aumenta el riesgo de infecciones bacterianas, parasitarias y de intoxicación alimentaria. Si bien se puede disfrutar de estos platos ocasionalmente, hacerlo con frecuencia puede comprometer la salud. Para minimizar estos riesgos, es fundamental asegurarse de que la carne sea de alta calidad y esté correctamente almacenada y manipulada.