La salicòrnia es, según el diccionario del Instituto de Estudios Catalanes, una "planta de los géneros Salicornia y Arthrocnemum, de la familia del quenopodiáceo, de hojitas escamiformes opuestas, tallos cilíndricos, articulados y carnosos, e inflorescencias espiciformes gruesas, muy resistente a la salinidad, que puebla los lugares litorales encharcados y los márgenes de las lagunas salinas." Si no has entendido absolutamente nada de esta definición, no sufras porque nosotros tampoco. Hoy te explicamos, de manera clara y sencilla, qué es la salicornia y cómo se utiliza en la cocina.
Qué es la salicornia
Si cogemos la definición del diccionario y la simplificamos, la salicornia es una planta en forma de pequeños cilindros de sabor salado y textura carnosa. Es parecido a los espárragos verdes, aunque más salado, y al tomillo, pero más crujiente y no tan fragante. Un ingrediente híbrido que tanto sirve para decorar como para aportar sabor a los platos. Crece en entornos salados, como cerca de las salinas, y tal como intuimos por el nombre, es una planta salada en forma de cuerno.
La salicornia sirve para hacer varias recetas y es un producto interesante porque se puede cocinar y servir de varias maneras: cruda, cocida o salteada. Precisamente por eso es un ingrediente tan apreciado en la alta cocina, una faceta de la gastronomía que busca la innovación constante.
Recetas con salicornia
Si quieres intentar hacer alguna receta singular con este producto, te recomendamos estas tres recetas con salicornia:
- Crema de verduras con salicornia: La primera es una receta sencilla. La salicornia aporta un punto extra a una preparación que puede ser extremadamente sencilla. Haz la crema de verduras que más te guste (calabacín, brócoli, alcachofa) y añade unos brotes de salicornia por encima. Pueden ser crudos o cocidos, pero ten en cuenta que le aportarán un extra de salado al plato.
- Pescado con salicornia: Siguiendo con el patrón de la primera receta, el pescado con salicornia es bien sencillo de hacer. Solo tienes que escoger el pescado que quieras, hacerlo a la plancha (o rebozado, al vapor o de la manera que más te guste) y acabarlo con un poco salicornia.
- Tempura de salicornia: La última receta es un poco diferente. La salicornia no solo es un acompañamiento, sino que puede ser un plato principal. Una tempura con esta planta (que no deja de ser salicornia rebozada) es una opción ideal para darle una vuelta divertida a este producto tan versátil.