Familia Torres comparte su legado vitivinícola con la presentación del proyecto Familia Torres Colección Privada, una extraordinaria selección de añadas antiguas que tiene como objetivo poner de relieve el potencial de envejecimiento de los grandes vinos de la bodega. Cada año, Familia Torres lanzará un número limitado de botellas excepcionales, con un envejecimiento de un mínimo de 10 años, que han descansado en la reserva privada de la familia y han sido seleccionadas meticulosamente para mostrar la complejidad que solo los años de evolución son capaces de infundir en los vinos.

Familia Torres Colección Privada se dirige a clientes privados, coleccionistas y restauradores de prestigio. En su primera edición, la colección cuenta con cinco vinos emblemáticos que han marcado la historia de la bodega y nueve añadas diferentes que van desde 1989 en el 2013 en el caso de los vinos más jóvenes. Mas La Plana 1989, el más antiguo de la colección, muestra una extraordinaria complejidad fruto de sus años de crianza. Del vino insignia de la bodega del Penedès, también están disponibles las añadas 2007, 2008, 2009, 2012 y 2013. Los otros vinos incluidos en la colección son Grans Muralles (2004, 2006, 2008, 2010 y 2012) y el chardonnay Milmanda (2012 y 2013), los dos de la Conca de Barberà, y Reserva Real (2012) y el riesling Waltraud (2012), del Penedès.

Foto: Familia Torres

Todos estos vinos, expresiones fieles del lugar del que proceden, han evolucionado majestuosamente con el tiempo, desarrollando un abanico de sabores y aromas que solo experimentan los vinos con años de evolución en botella. Incluso los vinos de una edad mínima de 10 años ya muestran su potencial de envejecimiento. Con este proyecto, Familia Torres invita a hacer un viaje al pasado y proporciona las claves para entender cómo podrían evolucionar en un futuro las añadas más jóvenes.

Cada año, Familia Torres lanzará un número limitado de botellas excepcionales, con un envejecimiento de un mínimo de 10 años

Para Miguel A. Torres, presidente de Familia Torres: "Estos vinos son parte de nuestro legado y un testigo vivo de nuestro compromiso con la excelencia. Es emocionante poder disfrutar ahora de estas añadas a las cuales augurábamos un gran potencial de envejecimiento y ver que el tiempo nos ha dado la razón. Son vinos de una gran complejidad que han evolucionado de manera excepcional".

Foto: Familia Torres

Para certificar la autenticidad e integridad de estos vinos selectos, cada una de las añadas que componen a la Familia Torres Colección Privada se presenta en un elegante estuche de madera de color oscuro, precintado con un sello de lacre y una cinta donde se indica la fecha de @FamiliaTorres relanzamiento. En el interior, se encuentra información sobre el vino y la añada. Las botellas conservan la etiqueta original y se preparan a mano, prestando especial atención en cada detalle. El riguroso proceso de selección por parte de la familia y el equipo técnico garantiza que solo las mejores añadas se incluyen en esta exclusiva colección y que todas las botellas han sido envejecidas y conservadas en la bodega privada de la familia en condiciones óptimas hasta el momento de su relanzamiento.