La tarta de manzana de los 3 vasos es una de esas recetas que destacan por su simplicidad y sabor. Ideal para aquellos que no tienen mucha experiencia en la cocina o simplemente buscan una opción rápida y deliciosa, esta tarta se ha ganado un lugar especial en los hogares gracias a su facilidad de preparación. Su nombre proviene de la particularidad de que todos los ingredientes se miden utilizando el mismo vaso, lo que elimina la necesidad de balanzas o medidas complicadas.
Una tarta clásica
Para comenzar con esta receta, lo primero que necesitas es reunir los ingredientes, que son muy sencillos y probablemente ya los tengas en tu cocina. Los ingredientes básicos son: un vaso de azúcar, un vaso de harina, un vaso de leche, dos o tres manzanas (dependiendo del tamaño), un sobre de levadura química o polvo de hornear, y un poco de mantequilla o aceite para engrasar el molde ante de poner el resto de ingredientes de la receta.
La preparación de esta tarta no podría ser más fácil. Primero, pelamos y cortamos las manzanas en rodajas finas, que posteriormente utilizaremos para cubrir la tarta. Después, en un bol, mezclamos el vaso de azúcar, el vaso de harina y el sobre de levadura. Una vez que estos ingredientes secos están bien integrados, añadimos el vaso de leche. Mezclamos todo hasta obtener una masa homogénea y sin grumos.
Una tarta con ingredientes sencillos y que probablemente ya tengas en tu cocina
Con la masa lista, engrasamos un molde con mantequilla o aceite para evitar que la tarta se pegue. Luego, vertemos la masa en el molde y distribuimos las rodajas de manzana por toda la superficie. Es importante que las manzanas queden bien repartidas, ya que durante la cocción se hundirán un poco y se integrarán con la masa, dando como resultado una tarta jugosa y con un delicioso sabor a manzana.
El siguiente paso es hornear la tarta. Precalentamos el horno a 180 grados Celsius y horneamos durante aproximadamente 40-45 minutos, o hasta que al insertar un palillo en el centro de la tarta, este salga limpio. Durante el horneado, la tarta adquirirá un color dorado en la parte superior y las manzanas se caramelizarán ligeramente, lo que aportará un toque extra de dulzura.
Una vez que la tarta esté lista, la dejamos enfriar antes de desmoldarla. Esta tarta de manzana de los 3 vasos se puede disfrutar tanto fría como tibia, y es perfecta para acompañar con un poco de nata, helado de vainilla o simplemente sola, con una taza de café o té.