Aprender a congelar el pescado de forma correcta nos será de gran utilidad. Si nuestros platos favoritos se elaboran con productos del mar, los secretos del congelado supondrán un añadido para nuestra cocina. Congelar el pescado sirve para detener la multiplicación de bacterias que alteran sus proteínas y grasas. Para conservar pescados y mariscos sin que pierdan su calidad, la congelación es la mejor opción, siempre y cuando los pescados estén frescos al momento de que los congeles.
Conservar pescados y mariscos: la congelación es la mejor opción
¿Cómo congelar el pescado?
Antes de nada, debemos atender a una serie de trucos para reconocer el pescado fresco. Posteriormente, debemos saber que la mejor forma de congelar el pescado es por ultracongelación. Es un sistema por el cual se alcanza una temperatura de 0 a -5 °C en menos de dos horas en todo el producto.
Sin embargo, si no disponemos de este tipo de tecnología, lo primero que debemos hacer es ver cuál es la cantidad de estrellas que tiene nuestro congelador. Un congelador con 3 estrellas, queda un poco corto para la correcta congelación del pescado, estos congeladores están preparados solo para la conservación de productos congelados. En cambio, si nuestro congelador tiene 4 estrellas está preparado para congelar pescado correctamente y conservarlo durante meses en torno a unos -18 ºC.
Una vez tengamos claro esta serie de factores importantísimos, debemos preparar el pescado en las raciones que vayamos a consumir. Es importante también limpiar bien las piezas y dejarlas listas para el momento de descongelación. Además, te recomendamos que lo etiquetes poniendo la fecha y el contenido del envase.
La manera ideal para congelarlo es guardarlo con una envasadora de vacío. Si no disponemos de la envasadora, la mejor opción es envolverlo en un film, a diferencia de la bolsa. De esta forma evitamos el contacto directo del pescado con el oxígeno, que puede deteriorar su perfecta congelación.
Congelar el pescado, importante para evitar el anisakis
Cada vez más, comer pescado tranquilamente y en condiciones de salubridad correctas, es la preocupación que más ha crecido últimamente en los hogares. Ante la gran crecida de anisakis presente en las vísceras del pescado, es necesario tomar una serie de preocupaciones y medidas para evitar problemas mayores.
Así pues, congelar el pescado previamente a su consumo y cocinarlo correctamente se convierte en una práctica fundamental, pues la anisakiasis solamente podemos contraerla al consumir pescados o cefalópodos crudos o sometidas a preparaciones que no matan al parásito. Entonces, ¿cómo podemos evitarlo? El primer paso para escapar del anisakis está en el momento de comprar el pescado. Debemos de comprarlo sin vísceras y si viene con ellas, se deben retirar lo antes posible. Posteriormente, para que el pescado sea seguro para nuestra salud, lo cocinaremos a más de 60º y si, por el contrario, queremos comerlo crudo, hay que congelarlo a -20º (una temperatura que solo alcanzan los frigoríficos con tres estrellas o más).
¿Y a la hora de descongelarlo?
No descongeles el pescado dejándolo a temperatura ambiente ni sumergiéndolo en agua porque eso puede multiplicar bacterias. Descongélalo bajándolo al refrigerador un tiempo, en el microondas, o empieza a cocinarlo sin descongelar, aunque si haces esto último, asegúrate de cocinarlo muy bien para evitar riesgos de gérmenes y parásitos. El pescado una vez descongelado no se puede volver a congelar, a menos que ya lo hayas cocinado.