Elegir la cola más rápida en el supermercado puede parecer cuestión de suerte, pero en realidad es un problema matemático. Un ingeniero ha analizado el fenómeno y ha dado con un truco basado en la ciencia. La mayoría de las personas opta por la fila con menos gente, pensando que será más rápida. Sin embargo, lo realmente importante no es el número de personas, sino la cantidad total de productos que llevan en sus carritos. Cada cliente extra en la cola implica un tiempo fijo de pago y conversación con el cajero, además del escaneo de productos. Por eso, una fila con más personas pero con pocas compras puede avanzar más rápido que otra con menos clientes pero carritos llenos. El truco es elegir la fila con menos productos en total, no la que tiene menos personas.
El truco de genio para elegir la mejor cola del supermercado
Otro factor clave es observar quién está en la cola. Personas mayores o clientes que pagan con efectivo suelen tardar más, mientras que aquellos que pagan con tarjeta o usan el escaneo automático agilizan el proceso. También es recomendable elegir filas donde la caja tenga un cajero experimentado. Un trabajador con práctica escanea más rápido y maneja mejor las incidencias. Además, las cajas en los extremos suelen estar menos saturadas porque la mayoría de los clientes se dirigen a las del centro.

La próxima vez que estés en un supermercado, en lugar de fijarte solo en la cantidad de personas, analiza cuántos productos lleva cada una y qué método de pago están usando. Con este truco matemático, evitarás largas esperas y saldrás antes de la tienda.
También nos podemos basar en elegir al trabajador con más práctica
Otro detalle que influye en la velocidad de la cola es la cantidad de artículos que requieren pesaje o comprobación manual. Frutas, verduras sin etiquetar o productos con descuentos aplicados pueden hacer que una fila avance más lentamente. Si ves que un cliente lleva muchos de estos productos, es probable que tarde más, incluso si su compra parece pequeña. También es importante evitar filas donde haya carritos con artículos repetidos en grandes cantidades, ya que pueden requerir confirmaciones adicionales del sistema.

Por último, la paciencia y la observación juegan un papel clave. Si te precipitas al elegir la fila sin analizar bien la situación, es más fácil terminar en la opción más lenta. Aplicar este truco no garantiza que nunca tendrás que esperar, pero sí aumentará las probabilidades de acertar. La próxima vez que estés en el supermercado, usa la lógica, observa los patrones y pon a prueba este truco matemático.