Cuando vamos a un restaurante, no solo estamos pagando por la comida, sino también por la experiencia. Sin embargo, los establecimientos de comida tienen estrategias cuidadosamente diseñadas para hacernos gastar más y consumir más de lo que realmente necesitamos. Este fenómeno no es casual; se basa en tácticas de psicología y marketing que influyen en nuestras decisiones de forma sutil pero efectiva. A continuación, te contamos algunos de estos trucos para que sepas cómo nos manipulan en los restaurantes.

Los trucos que utilizan los restaurantes

El diseño del menú es una herramienta poderosa para influenciar tus decisiones. Los restaurantes saben que la mayoría de los clientes miran primero la parte superior derecha del menú, donde suelen colocar los platillos más caros o los de mayor margen de beneficio. Además, pueden usar descripciones detalladas y apetitosas para hacer que ciertos platos parezcan más atractivos. Es probable que te sientas inclinado a pedir algo que realmente no planeabas probar, solo por la forma en que está presentado en el menú. No es coincidencia que algunos restaurantes usen iluminación tenue y música suave. Estos elementos están diseñados para crear un ambiente relajado, lo que puede hacer que los clientes se sientan más cómodos y estén dispuestos a quedarse más tiempo. Al prolongar tu estancia, es más probable que pidas más bebidas o incluso un postre. Por otro lado, en restaurantes de comida rápida, la música es más animada y ruidosa, fomentando que los clientes coman rápido y liberen el espacio para nuevos comensales.

Ambientes que nos hacen quedarnos más tiempo / Foto: Unsplash
Ambientes que nos hacen quedar más tiempo / Foto: Unsplash

El tamaño de las porciones en los restaurantes puede ser engañoso. A menudo, se sirven porciones más grandes de lo que realmente necesitas, lo que te incentiva a comer más. También existen platos que se presentan como “pequeñas degustaciones” o “tapitas” para fomentar que pidas más de uno. En el caso de las bebidas, los vasos grandes dan la impresión de un buen valor, pero generalmente están llenos de hielo, lo que reduce la cantidad real del líquido.

Pequeñas porciones para que tengas que pedir más / Foto: Unsplash
Pequeñas porciones para que tengas que pedir más / Foto: Unsplash

Los "especiales del día" suelen presentarse como una opción única y temporal, lo que hace que los clientes se sientan presionados a probarlos. Además, los menús suelen incluir un plato muy caro para que el resto de las opciones parezcan más asequibles. Este es el truco del precio ancla: al tener una opción muy costosa, los demás platos parecen ser una mejor oferta en comparación, aunque aún puedan ser caros. La presentación no solo hace que la comida se vea apetecible, sino que también puede hacer que parezca de mayor calidad o cantidad de lo que realmente es. Al servir platos decorados y bien organizados, los restaurantes buscan que te sientas satisfecho con la experiencia y, a la vez, que consideres regresar.

Los menús suelen incluir un plato muy caro para que el resto de las opciones parezcan más asequibles

Las bebidas son uno de los mayores generadores de ingresos para los restaurantes, y lo saben bien. Las cartas de bebidas están diseñadas para seducir al cliente a probar cócteles y otras opciones. Además, los camareros a menudo te preguntarán si quieres empezar con una bebida, aprovechando que las personas suelen decidir más fácilmente en ese momento.