Las patatas de bolsa son el snack preferido de mucha gente. Hay las clásicas de churrería, pero hoy en día podemos encontrar mil formas y sabores diferentes: de jamón, ganchillos, ruedas, cócteles variados, onduladas, de vinagre... hay de todo tipo. Pero si hay una cosa que todas tienen en común -aparte de dejarte los dedos bien sucios- es que todas las bolsas son un quebradero de cabeza a la hora de cerrarlas. Si te has quedado a medias y te han sobrado patatas, este es el mejor truco para cerrarlas y guardarlas para que no pierdan ni una brizna de sabor y textura.
El truco para cerrar las bolsas de patatas
La manera más práctica y habitual es utilizar una pinza. Arrugas un poco la parte superior de la bolsa y lo aseguras con una pinza, sea de tender la ropa o de cocina. También se puede utilizar una goma de pollo o cualquier otra goma elástica. Pero cuando no tienes ninguno de estos utensilios a mano -imagínate que haces una excursión a la montaña y te tienes que guardar una bolsa a medias en la mochila- la mejor opción es cerrarla siguiendo el truco que explica este usuario en la red social X (antiguo Twitter).
Un interesante tip… pic.twitter.com/VRpxp0ChkL
— El Club del Arte ������������������������ (@Arteymas_) September 28, 2024
La clave es doblar la bolsa sobre sí misma. Es decir, hacer los pliegues correctos para que quede cerrada y la puedas girar sin miedo que se abra y sin la necesidad de ningún utensilio externo.
Como doblar la bolsa
Los pasos para doblar la bolsa correctamente son los siguientes:
- Dobla las dos puntas de la bolsa formando un triángulo; exactamente como si empezaras a hacer un avión de papel.
- Da la vuelta a la bolsa.
- Haz tres pliegues en horizontal, tal como se muestra en el vídeo.
- Saca las puntas del extremo del último pliegue que has hecho para dejar la bolsa cerrada del todo.
La manera como conservamos los alimentos es tanto o más importante que la calidad que tienen
Como puedes comprobar, la técnica para cerrar la bolsa es bien sencilla. Para conseguir unos pliegues perfectos, sin embargo, tendrás que practicar. Y por mucho que domines la papiroflexia de patatas, las pinzas o las gomas siempre serán una alternativa fácil y rápida que puedes seguir utilizando.
La manera como conservamos los alimentos es tanto o más importante que la calidad que tienen. No sirve de nada comprar las patatas más buenas del mercado si después las dejas a la intemperie durante todo un día y se te acaban ablandando. Lo mismo pasa con la carne, el pescado, la verdura y cualquier otro producto, sea fresco o no. Así pues, tener en cuenta cómo y cuanto tiempo conservas las patatas y tus alimentos es indispensable.