Originario de Centroamérica y del Sur, el pimiento se ha convertido en un elemento esencial en las cocinas de todo el mundo, especialmente la catalana. Pimientos hay de muchos tipos: grandes, pequeños, rojos, amarillos, verdes, picantes, jugosos... En Catalunya, zonas como el Baix Llobregat o el Alt Empordà son conocidas por la producción de pimientos de calidad, especialmente de las variedades roja, verde y amarilla. Sea cual sea el que escojas, hoy te explicamos todo lo que puedes hacer con esta verdura, una de las más típicas de las recetas tradicionales catalanas.
Una verdura catalana
En la cocina catalana, el pimiento es protagonista de numerosas recetas tradicionales. Algunos de los platos más destacados incluyen:
- Escalivada: Un plato sencillo y delicado hecho con pimientos, berenjenas y cebollas asadas al horno o a la brasa. A menudo se acompaña de pan con tomate y anchoas. También se le puede añadir un trozo de longaniza. Es la versión catalana y mejorada de la pizza italiana.
- Pimientos rellenos: Rellenos de carne picada, arroz o verduras, cocidos al horno y aliñados, con hierbas mediterráneas, los pimientos rellenos son el vehículo perfecto para aprovechar los pimientos, sean grandes o pequeños.
- Sofrito: Base indispensable de platos como el arroz o la fideuá, donde el pimiento rojo aporta dulzura y profundidad al sabor. Aunque para hacer un sofrito basta con cebolla y tomate, el pimiento es la tercera pata de un trípode que eleva la cocina al siguiente nivel.
- Pimientos del piquillo: A pesar de que son originarios de Navarra, los pimientos del piquillo rellenos también tienen presencia en Catalunya, especialmente cuando se llenan de bacalao o marisco. Son una evolución de los pimientos rellenos y una auténtica bomba de sabor.
Sea como ingrediente principal o como complemento, el pimiento ha ganado un sitio de honor en nuestras mesas y seguirá deleitándonos con su color, sabor y versatilidad
Una hortaliza sorprendente
El pimiento no solo es rico en vitaminas C y A, sino que también es una fuente importante de antioxidantes. Una curiosidad poco conocida es que el pimiento rojo contiene mucha más vitamina C que una naranja. También hay que destacar que el pimiento se puede consumir tanto crudo como cocinado, cosa que le confiere una enorme versatilidad en la cocina. En el caso del pimiento asado, su sabor dulce y ahumado es uno de los secretos mejor guardados de muchas recetas. Sea como ingrediente principal o como complemento, el pimiento ha ganado un sitio de honor en nuestras mesas y seguirá deleitándonos con su color, sabor y versatilidad durante muchos años.