¡Hola hola gourmeters! Hoy os vengo a explicar que hay veces en la vida en que menos es más, veces en que no complicarse la vida es la mejor respuesta. Hay productos como el pescado que, aunque se puede cocinar de millones de maneras diferentes y deliciosas, luce más cuanto menos tratado está, y eso es lo que nos disponemos a probar para cenar. Antes de juzgar un restaurante situado en el Born, en el corazón de Barcelona, y caer en la trampa de decir que se trata de un lugar turístico, dadme la oportunidad de explicarme. Sí que es cierto que en el Born hay muchos restaurantes que los locales prefieren evitar, pero también los hay que valen la pena una visita como es el caso de Chao Pescao. Si un día os despertáis con ganas de pescado fresco, muy fresco ya veréis porqué, y de una mariscada de calidad a un precio de lo más razonable, Chao Pescao es vuestro lugar. ¡Vamos a ello!.
Entramos de lleno en el Born, pasamos por la preciosa Basílica de Santa Maria del Mar, avanzamos por el animado paseo del Born, hacemos parada para tomar una caña en la plaza Comercial, entramos en el Born Centre Cultural para admirar las ruinas y salimos por la puerta de atrás de este espacio; allí mismo nos chocaremos con el Chao Pescao. Aunque cenaremos en la calle (porque el Born es encantador y porque parece que corre un poco de aire aunque ya se sabe cómo son las noches de verano barcelonesas) es obligatorio entrar en el local. La decoración es bonita y un neón enorme nos dice que 'eat fish', que comamos pescado, y lo haremos, y tanto que lo haremos. Pero lo que más llama la atención es lo que hay en la barra: una pescadería!. Literalmente un expositor con hielo picado y una gran variedad de pescado y marisco todo dispuesto de manera tal que te hace pensar que estás en tu pescadería de confianza haciendo la compra semanal. Y es que esta es la gracia de Chao Pescao, tú escoges el pescado y cómo lo quieres degustar: a la plancha, fritura, en forma de tártar o un poco de todo, que es lo que me dispongo a hacer. En la pescadería de este restaurante hay gambas, pececillos estilo sonsos, pulpitos, calamares, sardinas, salmón, atún, ostras, vieiras...
Los tacos más originales
Sabéis que tengo buen estómago y ya habréis visto que no es fácil atiborrarme, pero hoy, por primera vez, veréis cómo sufro una derrota culinaria. Empiezo animada con dos entrantes, un tártar de vieira con aguacate, tomate, un mango dulce como pocos he comido y unos nachos caseros. La vieira que me ha hecho salivar en el expositor ahora la tengo en el plato y se nota la frescura porque se deshace en la boca. Me dejo enredar y pido otro entrante cuando escucho que hay tacos de chicharrón de pulpo. Claro, de entrada el nombre genera curiosidad y una gourmeter no puede decir que no a probar cosas nuevas: se trata de una fajita de maíz con trozos de pulpo frito y muy crujientes. Una delicia, pedidlo!.
Calidad precio de 10
Cuando miráis el vídeo veréis a una gourmeter estremecida (en el buen sentido) al ver la bandeja de pescado y marisco que llega a su mesa. Qué mariscada más completa: coquinas, almejas, gambas, gambones, mejillones, cangrejo, sepia a la plancha, calamarcitos a la plancha, calamar a la andaluza, rejos fritos y todavía me olvido de alguna cosa. Todo es de gran calidad, por eso insisto en el hecho de que no os perdáis locales por el simple hecho de dar por hecho que como están en el centro son trampas turísticas.
Las coquinas están salteadas y yo siempre digo que son las pipas del mar, se comen en un abrir y cerrar de ojos, son pequeñas y adictivas, el cangrejo ha sido una novedad, no sé si me lo he comido correctamente, pero he optado por abrirlo por la mitad apretar con fuerza y exprimir la carne, que sabrosa!. Los mejillones son grandes, pero no de aquél tamaño monstruoso que no gusta a mucha gente que considera que son poco naturales, las almejas carnosas y los gambones poco cocidos que así son mejores (no nos gustan las gambas más hechas de la cuenta). Pero diría que mi preferido de la mariscada ha sido el calamar troceado rebozado y los rejos fritos. Los dos productos están cocinados con respeto, sin florituras ni salsas para acompañarlo, porque no les hace ningún tipo de falta.
Y ahora os hablaré de mi derrota, y es que no he sido capaz de acabarme toda la comida, así que me lo llevo hacia casa!. Chao Pescao es un restaurante que no te quiere convencer de que tiene el o la chef que hace el mejor pescado, te quiero convencer de que a veces más es menos y que cuando un producto es fresco cuanto menos se manipule mejor. Y me ha convencido. ¿Pero sabéis que os acabará de convencer? Que esta mariscada descomunal no cuesta ni 30 euros por persona. ¡Hasta la próxima gourmeters!.