¿Cansado del típico cordero, el capón o la misma fuente de marisco? ¿Te toca ser ejercer de anfitrión esta Nochebuena y quieres cambiar las tradiciones, pero te faltan ideas? Aquí van tres recetas con las que sorprender a tus invitados y lograr que terminen aplaudiendo después de rebañar hasta la última gota del plato.
3 recetas para resaltar en Nochebuena
Solomillo Wellington
Ha pasado de ser considerada una receta “viejuna” propia de restaurantes demasiado clásicos a volver a alzarse con el título de la más buscada. De hecho, chefs de reconocido prestigio vuelven a incluirla en sus cartas, tanto la versión más clásica con carne como algunas novedades que incluyen pescado. Los ingredientes que necesitas:
- Una pieza grande de solomillo de ternera sin partir
- 4 cebollas o chalotas
- Medio kilo de champiñones
- 1 brick pequeño de nata líquida para cocinar
- Una cucharada de Salsa Worcestershire
- 50 gramos de paté
- Masa de hojaldre rectangular
- 1 huevo para pintar el hojaldre
- Mostaza de Dijon
- Sal y hiervas aromáticas al gusto como el tomillo
Empezamos troceando y sofriendo las cebollas y los champiñones. Cuando estén dorados, se añade la nata líquida y la salsa Worcestershire. Se deja que se cocine todo junto unos minutos y se reserva. Sazona el solomillo y séllalo en una sartén a fuego alto por todos los lados. También se deja enfriar. Cuando las dos preparaciones están frías, extendemos la masa de hojaldre y la cubrimos con el sofrito y repartimos el paté. Después, untamos bien el solomillo con la mostaza y lo colocamos sobre la masa. Con ayuda del papel de horno envolvemos la carne con la masa y nos ayudamos del huevo batido para cerrar los huecos. Ya en la bandeja del horno terminamos de pintar y se deja cocinar entre 30 y 45 minutos. Dependiendo del grosor de la carne y del punto de cocción que nos guste. Antes de partir y servir, debe reposar unos 10 minutos. Unas verduras asadas son la mejor compañía para este plato tan contundente.
Rape en salsa americana
Esta receta es ideal para celebraciones familiares en las que no hay mucho protocolo porque la pelea por la salsa es casi un ingrediente más. Lo que necesitas antes de que se siente a la mesa es:
- Un rape cortado en trozos grandes (para cuatro personas)
- Una cebolla
- Media lata de tomate triturado
- Un sobre de tinta de calamar
- Licor para flamear tipo coñac
- Salsa Tabasco si quieres darle un toque picante y un extra de pan de hogaza con mucha miga para mojar bien
Empieza marcando el rape en una sartén caliente con un poco de aceite. Reserva el pescado, añade un poco más de aceite y pocha la cebolla a fuego lento. Cuando esté dorada, añade una pizca de la tinta de calamar para darle ese toque marrón tan característico y la salsa de tomate. Llega el momento de flamear con el licor elegido. Cuando la llama desaparezca, añade la salsa picante (si quieres) y sazona. Si lo necesitas, puedes preparar el plato hasta este punto con antelación y retomarlo cuando tus invitados estén en la mesa. Solo tendrás que calentar la salsa y después añadir el rape. En 10 minutos (mientras degustan el aperitivo) tendrás el plato listo para servir. Como guarnición puedes elegir entre patatas fritas (si hay niños te los habrás ganado) o arroz salvaje. Y recuerda la doble ración de pan.
Redondo de pavo
Una receta versátil, ligera y más económica para llenar de sabor mesas muy concurridas. Para cuatro personas necesitas:
- 1 pechuga de pavo
- 10 lonchas de jamón o beicon
- 250 gramos de carne picada de cerdo
- Un puñado de orejones, ciruelas secas y pasas junto a otro de piñones
- 1 cebolla
Prepara un sofrito con la cebolla, la carne picada y los frutos. Después extiende sobre papel film las lonchas del jamón o el beicon y coloca encima la pechuga de pavo abierta y estirada. Sazona a tu gusto y extiende encima el sofrito. Con ayuda del papel plástico, enrolla todos los ingredientes y fíjalos con palillos. Para que quede más crujiente, dora por todos los lados el rollo en una sartén antes de introducirlo en el horno. En menos de una hora tendrás tu rollo listo. Para darle un punto más vegetal puedes añadir unas espinacas y si quieres que esté más jugoso añade queso al relleno. En este caso, como guarnición te puedes decantar por un puré de patatas ligero o un arroz con pesto.