La primavera es una estación maravillosa. Más horas de luz, temperaturas cálidas que animan a disfrutar de planes al aire libre y el campo en su mejor versión, lleno de flores y colores. Pero, ¡achís! Esta época no es tan idílica para quienes sufren alergias primaverales.
De hecho, esta primavera se espera tan dura que incluso las personas que no suelen verse afectadas por el polen podrían notar algunos síntomas. Así lo confirma la Red Aerobiológica de Catalunya, quienes tras analizar la previsión meteorológica confirman que los problemas llegarán más tarde, pero con mucha más fuerza.
El enemigo
El polen es el causante de las temidas alergias primaverales, pero ¿sabes qué plantas son las que más problemas causan? A la cabeza siempre se encontramos las gramíneas, que están detrás de casi la mitad de los casos de alergia. Pero le siguen de cerca el plátano de sombra, cuyo polen le hace la vida un tanto complicado a uno de cada cuatro catalanes.
Debido a esto, desde hace varios años se trabaja para reducir la cantidad de estos árboles, ya que solo en Barcelona suman casi 50.000 ejemplares.
Para poder hacer frente a la alergia, además de seguir el tratamiento farmacológico recetado por el especialista, nos podemos ayudar en algunos productos cotidianos
Un extra a los antihistamínicos
Para poder hacer frente a los síntomas de la alergia, además de seguir el tratamiento farmacológico recetado por el especialista, nos podemos ayudar en algunos productos cotidianos que tienen una gran eficacia ante los problemas que genera el polen.
Aquí van cinco de los más potentes y también de los más sencillos de encontrar e introducir en tu dieta:
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Kiwi
Siempre se ha dicho que la Vitamina C ayuda a curar los resfriados y por eso se recomienda el consumo de naranjas y otros cítricos en invierno. Curar no es exactamente lo que hace, aunque si, está demostrado que mejora la irritacióí de las vías respiratorias altas y combate la rinitis, es decir, el moqueo constante. De todas las frutas, el kiwi es una de las que mayor concentración de Vitamina C presenta, convirtiéndose en un antihistamínico natural.
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Aguacate
La fruta de moda no podía faltar en esta lista. Si aún te resistes a las famosas tostadas que te hacen sentir un influencer por la mañana, si sufres de alergia este va a ser el empujón que te faltaba para incluirlo en tu dieta. Además de la nombrada vitamina C, el aguacate es rico en Vitamina E, siendo así un gran antioxidante que ayuda a reducir la inflamación.
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Salmón
Al hilo de las propiedades del aguacate y porque maridan a la perfección, tenemos que nombrar al salmón. Su concentración en Omega 3 es superior a la de la fruta tropical y muy valorada por los alérgicos ya que este ácido graso reduce la producción de inmunoglobulina E (IgE), es decir, el anticuerpo responsable de la aparición de algunos síntomas como puede ser el asma.
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Chocolate
En pocas ocasiones se recomienda este alimento tan relacionado con el placer así que habrá que aprovecharse. Uno de los motivos es que el cacao contiene polifenoles. Estos tienen propiedades con efectos antiinflamatorios, antimicrobianos, anticancerígenos y antioxidantes y, además, colaboran para equilibrar la microbiota, que es lo que en este caso nos interesa. Los últimos estudios han demostrado la relación que tiene la mircrobiota en los tratamientos de enfermedades autoinmunes, como puede ser la alergia.
Pero, además, el chocolate contiene triptófano. Este aminoácido consigue levantar el ánimo, algo esencial cuando los síntomas de la alergia nos dejan hechos polvo.
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Ajo y cebolla
La base del sofrito perfecto es también un antihistamínico natural de primera. El secreto es la quercetina, un potente antioxidante puede detener la liberación celular de histamina, el causante de los síntomas de la alergia.
Seguro que has escuchado el poder del ajo se concentra cuando lo consumimos crudo, pero en este caso es válido también cocinado.
Por su parte, la cebolla tiene una consolidada fama a la hora de reducir la mucosidad, algo que en esta época es una necesidad.