Después de meses con la inflación por las nubes, todos sabemos que es fundamental aprovechar las ofertas, los descuentos y las promociones tipo 3x2, pero ¿hay algo más que pueda hacer para rebajar el impacto que la subida de precios tiene en mi economía doméstica? La respuesta es sí.
Una de las medidas que más te puede ayudar es elegir los alimentos correctos y para ello hay dos factores. Por un lado fijarnos en las noticias y saber qué sube y qué baja debido a medidas como la rebaja del IVA o ayudas a un sector determinado, pero por otro lado, hay otro grupo de productos que son mucho más fáciles de identificar y estos son los de temporada.
Sobre todo, en frutas y verduras, la diferencia de precio puede ser bastante importante. De igual forma que si “pillamos” estos alimentos en su comienzo de temporada o en la parte central, cuando hay mucha más demanda.
Así, compaginando estos dos factores, estos son los siete alimentos con los que puedes llenar tu cesta de la compra a precios más que asequibles este mes.
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Leche. Junto a otros lácteos como la mantequilla o los yogures, este segundo trimestre del año ha terminado con unos precios más bajos después de la gran subida que se produjo el año pasado. El problema es que son perecederos y no te deja acumular mucha cantidad.
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Arroz. Empezó el año con una subida de susto, pero ahora los precios han bajado. De hecho, ha sido el producto que más ha variado su precio desde que comenzó el año. Ideal para esas paellas que tanto gusta en verano.
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Pescadilla. En julio, la merluza en la reina de los mares y de los mercados. Su precio desciende un poco, pero aún así sigue siendo alto. Por eso triunfa su “versión” eco, la pescadilla. Pertenece a la misma familia por lo que sus propiedades son muy similares, pero nos la llevamos a casa por unos cuantos euros menos.
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Mejillón. Es tan nutritivo y versátil como fácil de preparar. En julio está de temporada y dicen los expertos que está siendo un buen año, algo que se ve reflejado en sus precios. Un alimento barato, sanísimo y con el que preparar una cena diferente en unos minutos.
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Sandía. Por si no lo recuerdas, el pasado julio comer sandía era un lujo al alcance de muy pocos. Este año parece que la situación ha cambiado y, en este momento, te puedes llevar a casa una buena sandía sin necesidad de firmar una hipoteca. Y no hay fruta más refrescante para una tarde de verano.
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Nectarina. Ya hace unas semanas que se empezaron a ver melocotones, albaricoques y nectarinas en las fruterías. Y, aunque bien es cierto que en un primer momento lo precios eran altos, ahora que la temporada está en su ecuador, la cantidad que se oferta es mucho mayor y, por lo tanto, los precios menores.
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Calabacín. En el espacio de las verduras y las hortalizas, julio es un mes excelente por la cantidad y variedad que encontramos. Uno de los que están ahora mismo en su máximo de producción es el calabacín. Y, al igual que ocurre con el melocotón o la nectarina, su precio ha bajado los últimos días mientras que su calidad es estupenda, de hecho, están en su mejor momento.
