Cuando en las encuestas preguntan por los platos preferidos acostumbran a destacar los mismos. Una decena de imprescindibles que no fallan, ocupando las posiciones punteras de los rankings. Una cosa que se echa de menos a menudo es la pregunta por los ingredientes con más preferencias. No es lo mismo que los platos, claro está, y seguro que los resultados serían mucho más sorprendentes y con una variedad más agradable. Así y todo, un alimento que con toda certeza aparecería como uno de los favoritos es el chocolate.
Cómo potenciar el sabor del chocolate
Por suerte de todos nosotros, no nos tenemos que conformar con un único ingrediente, sino que tenemos el privilegio de combinar y fusionar ingredientes para obtener recetas innovadoras y maravillosas. Los maridajes aportan ritmo, alternativas y sorpresas fantásticas a los fogones de los restaurantes, pero también a los hogares de aquellos que pretenden jugar y divertirse elaborando nuevas creaciones. A continuación, te proponemos una opción accesible para sorprender con maridajes deliciosos sin complicaciones. Su propuesta está en función de combinar el intenso sabor y los grandes beneficios del cacao orgánico con productos cotidianos y fáciles de conseguir, formando una mezcla perfecta.
El chocolate es el centro de esta experiencia gastronómica, ya que su versatilidad permite combinaciones infinitas que van desde el chocolate negro 100% hasta variantes más atrevidas, como el chocolate de maracuyá. Si en estos chocolates, que destacan por su pureza y calidad se unen otros ingredientes de primer nivel, como el queso o el ron, se crea una verdadera explosión de sabores.
Chocolate y queso: una combinación ganadora
El queso, con su textura cremosa y sabor salado, es el compañero perfecto del chocolate, especialmente cuando se trata de quesos curados o azules. La intensidad del queso resalta la dulzura del cacao, creando una armonía de sabores. Quesos como el brie, el manchego o el roquefort se convierten en aliados ideales para acompañar chocolates de alto porcentaje en cacao. En particular, una óptima recomendación es casar el chocolate de maracuyá con queso brie, una combinación que lleva la experiencia a otro nivel. Este chocolate, elaborada con granos de cacao ecológico nacional de excelente calidad y maracuyá ecológico ofrece una sensación única que resalta los sabores frutales y la suavidad del queso.
Chocolate y ron: una explosión de sabores
El ron, especialmente el viejo, aporta un toque de sofisticación al maridaje, con notas de caramelo, vainilla y especias que se combinan perfectamente con el chocolate. Una sugerencia es la combinación del chocolate 100% con Ron Flor de Caña cinco años, un ron prémium con cuerpo medio que ofrece aromas frescos con notas de frutos rojos, caramelo y ciruela. En la boca, destacan las notas de vainilla intensa, frutas tropicales y chocolate, con un final seco y ligero.
Chocolate y frutas: la excelencia en el paladar
El chocolate, especialmente la negra, se combina excelentemente con ingredientes como los frutos rojos (fresas, frambuesas, moras), el plátano, las naranjas o las manzanas y, también, la granada. El chocolate combina de manera excelente con estos elementos porque sus sabores se complementan de manera armónica. Las frutas aportan un frescor y una acidez natural que equilibren la dulzura intensa del chocolate. Los frutos rojos, como las fresas, frambuesas y moras, tienen una acidez sutil que resalta el sabor profundo del chocolate, creando un contraste de sabores agradables. Esta acidez también ayuda a “desengrasar” la sensación de peso del chocolate más dulce. Por otra parte, los plátanos, con su suavidad y dulzura, crean una textura cremosa que se integra perfectamente con el chocolate, potenciando el sabor y aportando una sensación delicada y reconfortante. Así, la combinación de frutas y chocolate crea una experiencia gustativa rica y equilibrada, donde cada ingrediente potencia el otro, ofreciendo una sensación de placer instantáneo.