Una receta de aquellas que nos permite mojar pan y de las que genera envidias al comensal del lado. Hoy, he considerado más adecuado utilizar el garbanzo como legumbre, pero podéis hacer el mismo plato con judías.
De la misma manera, podéis utilizar otros tipos de seta. El plato de hoy es de aquellos que podéis cocinar durante el fin de semana y, a causa de su buena conservación, consumirlo durante la semana o, incluso, congelarlo. Espero que os guste.
Para las albóndigas:
- 200 g de carne picada de cerdo
- 200 g de carne picada de ternera
- 1 huevo
- 2 dientes de ajo
- perejil
- un chorro de leche
- miga de pan
- pimienta negra
- sal
Para hacer el plato:
- 1/2 puerro
- 1 cebolla picada
- 4 o 5 tomates maduros rayados
- 30 g de ceps (setas) deshidratadas
- 20 albóndigas
- 600 g garbanzos cocidos
- un chorro de vino blanco
- agua
- sal
Variantes:
- Lo podéis hacer con polvo de cep
- Podéis sustituir los garbanzos por judías o patatas cuadradas
- Se puede añadir una picada de frutos secos
- Podéis incorporar un vaso de caldo si os gusta con más salsa
Podéis cocer los garbanzos previamente o comprarlos ya cocidos.
Preparamos las verduras.
Que queden sumergidos. Estarán unos 20-30 minutos en remojo.
Mientras tanto, haremos las albóndigas. Picaremos un par de dientes de ajo y perejil.
En un cuenco pondremos el ajo y perejil y cuatro o cinco rebanadas de miga de pan. Yo compro pan de payés que va mejor.
Aprovechad para desmenuzarlo un poco.
Añadiremos un chorro de leche para conseguir hacer una pasta con el pan.
E incorporamos un huevo.
... un poco de sal...
... y la carne picada. A mí me gusta hacerla con un 40% de cerdo y ternera en un 60%.
Se remueve todo y ya podremos empezar a hacer bolas. Seguidamente las pasaremos por pan rallado y harina.
Muy bien. Ya las tenemos preparadas. Ahora pondremos abundante aceite a calentar.
Lo tenemos todo a punto.
Mientras se hacen las albóndigas podemos ir picando la cebolla...
... y el puerro.
El puerro se tiene que cortar por la mitad.
De esta manera lo podréis limpiar mejor debajo del grifo. Ya sabéis, puede contener arena.
Y lo picamos también.
Dad la vuelta a las albóndigas, que no se quemen.
Rayaremos los tomates maduros.
Cuando estén hechas las albóndigas...
... las reservaremos.
Aprovechad un poco de aceite de freír las albóndigas...
... para hacer el sofrito.
A continuación el puerro. Dejadlo unos instantes que se haga.
Lo mezclaremos todo junto un poco.
Cuando empiece a dorarse añadiremos el tomate a la cazuela.
Muy bien.
Al mismo tiempo, pondremos un chorro de vino blanco (1/2 copa).
Y también el jugo de hidratar las setas.
Un poco de sal...
... y lo dejaremos tapado a fuego bajo durante unos 15-20 minutos.
Cuando el sofrito esté concentrado, lo pasaremos a un bol para triturar.
Muy bien.
Y lo dejamos bien fino.
Lo volvemos a pasar a la cazuela y dejamos que arranque el hervor de nuevo.
Ahora, incorporaremos las setas.
Lo dejaremos cocer unos 10 minutitos.
Pasado este tiempo, ya podremos poner las albóndigas...
... que mezclaremos bien...
... y los garbanzos cocidos.
Ya empieza a tener buena pinta esto.
Para acabar, dejadlo cocer todo junto unos minutos.
Rectificad de sal, si hace falta, y tirad un poco de perejil picado por encima.
Ya podéis emplatar.
¡Y a mojar pan, que es media vida, chicos!