Os paso la receta de la almendra crocante (o crocanti) que se utiliza mucho para decorar pasteles. No estamos hablando de almendras garrapiñadas, aunque es prácticamente lo mismo. Son granitos de almendra caramelizados y crujientes.
El crocante lo podéis comprar hecho, si, pero no sé que le ponen al industrial que tiene un sabor muy extraño. No cuesta hacerlo en casa... y notaréis la diferencia con los que venden ya hechos. Una de aquellas cositas que vale la pena hacértelas tú mismo. ¡Venga!
200gr. almendra en grano
150gr. azúcar
una cucharada de vainilla, azúcar avainillado o esencia de vainilla
Variantes:
Hay quien añade un poco de agua y/o glucosa
También se pueden añadir unas gotas de esencia de limón
Poned el azúcar en un cazo.
A mí me gusta utilizar el azúcar avainillado en este caso, pero no tenía. Podéis añadir cualquier esencia de vainilla, como esta de la casa Vahiné.
Un tapón será más que suficiente.
Ahora añadimos la almendra marcona en grano.
Lo ponemos todo al fuego. Yo utilizo el fuego más pequeño de todos y a la mitad de fuerza. Conviene tener un cierto calor, pero que no sea demasiado fuerte.
No paréis nunca de remover, de abajo hacia arriba. El azúcar se tiene que ir fundiendo poco a poco. Si el fuego es demasiado fuerte, se os puede quemar la almendra y entonces ni el color ni el sabor serán uniformes.
Veréis cómo poco a poco la almendra también se va tostando. No paréis de remover. Li lo dejáis de hacer facilitaréis la formación de grumos que después cuestan de deshacer.
Cuando tenga todo este color dorado tan bonito... ya habréis acabado.
Para evitar que se enganche, lo tenéis que extender sobre un mostrador o mármol.
Procurad que no se amontone. Que la almendra tenga una única capa.
Yo lo hago con la mano... y así queda muy bien separada.
Cuando el crocante esté frío, ya lo podéis conservar dentro de un taper en un lugar fresco y seco.
Y ya podéis hacer vuestras elaboraciones.
Como decorar un pastel de nata...
... hacer un Pastel de la Diada....
... o para hacer un pastel de yema pastelera con frutos rojos como este...
¡Buen Provecho!