Qué clásico, ¿eh?...no podía faltar. Tsch... un respeto al arroz con leche!. Pues quizás hacía más de 20 años que no lo probaba... ¡y qué bueno! Eso si... es un poco pesado... bueno... muy pesado, vale. Por este motivo tenéis que hacer raciones más bien pequeñas o no os las podréis acabar. Servidlo bien frío de la nevera.
200gr. de arroz
125gr. azúcar
1 litro de leche
1 rama de canela
1 peladura de limón
canela en polvo para decorar
Variantes:
Se puede hacer con leche de almendras
Se puede tirar un poco de polvo de canela por encima al servirlo
Se pueden utilizar platos individuales o una bandeja grande
Podéis variar la cantidad de leche si os gusta más o menos jugoso
Preparamos todos los ingredientes.
La piel de limón... cuanto menos parte blanca tenga mejor. La parte amarilla es la más aromática.
Pesamos el arroz. Según el libro corpus son 200gr de arroz por litro de leche, pero yo pongo sólo 150gr... así queda más jugoso, pero es una apreciación personal, claro.
Ahora ponemos a hervir la leche con el azúcar y lo removemos.
Incorporamos la peladura de limón y una rama de canela.
Removemos de vez en cuando y cuando arranque el hervor...
... echamos el arroz y lo dejamos cocer unos 20-25 minutos, removiendo de vez en cuando para evitar que se enganche de la base.
Quitad la canela y la piel de limón...
Escudillad el arroz en cazoletas pequeñas...
... que no sean demasiado demasiado grandes. Dejadlas enfriar a temperatura ambiente.
Una vez frías... tirad un poco de canela molida por encima.
Ahora ya lo podríamos probar, pero es mejor reservarlo en la nevera un par de horas y consumirlo frío.
Y aquí tenemos acabado el tradicional arroz con leche de toda la vida.
¿Lo queréis probar?
Que quede bien jugoso... sobre todo.
¡Buen Provecho!