Este es un plato típicamente navideño, ya que contiene muchas grasas y calorías... y por Navidad... todo tienen que ser excesos... ¿No? Pero está muy bueno, pavos. En casa todo el mundo pregunta cuándo podrá comer el tradicional asado de Navidad... y es que es de aquellos guisos que dejan huella. Os recomiendo que lo hagáis uno o dos días antes de comerlo. De hecho, yo lo he llegado a hacer una semana antes. Pensad que no hay que congelarlo, ya que se conserva en su propia grasa. Es evidente, que el secreto de este plato está en la calidad del pollo o del pato, que tienen que ser de payés. Por cierto, un consejo, si podéis compráis las ciruelas (con hueso siempre) y los piñones 15 días antes... mejor que a última hora suben mucho de precio.
1 pato de payés(ecológico)
2 cebollas picadas
6 ajos
100 g de manteca de cerdo
1 copa de coñac
1 copa de vino blanco
200 g de ciruelas con hueso
un puñado de piñones
1/2 rama de canela
pimienta negra
dos hojas de laurel
agua
sal
Variantes:
- Podéis cocinar de la misma manera cualquier otra ave
Preparamos todos los ingredientes.
El pato de payés es muy sabroso... y normalmente son animales bastante grandes. Un pato de estos os puede hacer 3 o 4 kilos tranquilamente. A veces se tienen que cocer en dos cazuelas... porque no cabe en una sola.
Pedidle a vuestro pollero que lo corte para asar.
Empezaremos por dorar todo el pato... haciendo uso de la manteca como grasa.
Lo ponemos en una sartén con un poco de aceite.
Lo salamos y lo pimentamos, pieza por pieza.
Con la grasa caliente... doraremos el pato.
Tiene que quedar con un color tostadito... y cuidado que salpica.
Mientras doramos el pato... iremos pelando la cebolla.
Probablemente, lo tengáis que hacer en dos series... y tendréis que ir reservándolo.
Ahora, retiraremos el exceso de aceite para evitar que nos quede un asado demasiado aceitoso. Dejamos el justo para sofreír la cebolla y el ajo. El resto lo podéis reservar para hacer otros asados.
Cortamos la cebolla "mal cortada", es decir, a trozos grandes. Los ajos enteros con piel y por la mitad.
Ahora, en la misma cazuela y con el pato reservado... doraremos un poco la cebolla y el ajo... junto con la canela... de la que extraeremos todo el aroma con este sofrito.
Pasados unos minutitos y con la cebolla un poco dorada (tampoco demasiado)... incorporamos todo el pato y lo mezclamos bien dentro de la cazuela.
Ahora pondremos el vino. Yo utilizo este vino para cocinar... que es bastante aromático por las hierbas con las que se ha macerado, pero podéis utilizar cualquier tipo de vino blanco.
Pondremos un vaso.
Lo añadimos.
Al mismo tiempo... también pondremos un vaso de coñac (brandy).
Lo taparemos y esperaremos a que se evapore el alcohol unos 10 minutitos a fuego medio.
Pasado este tiempo... pondremos agua caliente... hasta casi llenar todo el pato.
Lo saláis un poco... y dejad que se haga a fuego lento durante 70-80 minutos. Vigilad de vez en cuando que no falte agua y añadís más.
Mientras, podremos ir preparando las ciruelas (con hueso) y los piñones.
Como podéis ver... yo he hecho dos cazuelas.
Probad qué tal está la carne. El pato puede necesitar entre 80-120 minutos de cocción y depende del tipo de pato. En cualquier caso, la carne de esta ave siempre quedará más dura que la del pollo. Es una característica propia. Cuando falten unos 15-20 minutos de cocción para acabar el asado... añadiremos los piñones...
Y las ciruelas. Removedlo todo junto, con cuidado de no estropear las ciruelas y rectificáis de sal.
Una vez hecho... no lo toquéis. Dejadlo enfriar en la misma cazuela... tapado. Como todos los asados... es importante hacerlo mínimo un día antes de consumirlo. En reposo, la carne coge más sabor... y se ablanda con la propia grasa. Yo lo dejo fuera de la nevera, dentro de la cazuela, toda la noche.
Tranquilos que no se estropeará. Todo lo que se conserva en grasa aguanta mucho tiempo... como, por ejemplo, el confit de pato.
Una hora antes de servirlo, podéis calentar toda la cazuela... hasta que arranque a hervir... y lo paráis.
Y ya está chicos... a disfrutar.
Qué bueno... ¡Y cuántas calorías!
Y a mojar pan.
... un buen vinito tinto para acompañar.
Por cierto, a la hora de servirlo podéis mezclar el Pollo asado con ciruelas y piñones con el pato... y mezclar los juguitos también. ¡Buen Provecho!