Normalmente, cuando se cocina atún fresco, se procura limitar la cocción de esta carne, ya que fácilmente queda seca. Hasta aquí la mayoría estaremos de acuerdo.
Pero esta receta busca, precisamente, la textura cocida del atún, aquella que es más próxima a la de una lata conserva. ¿Me entendéis, verdad? Por este motivo, es imprescindible regar bien la carne con esta deliciosa salsa. Y el conjunto, personalmente, me ha parecido muy bueno.
Recomendable, os diría, teniendo en cuenta que yo soy de los que admite todas las cocciones del atún. Si sois de los que no soportáis el atún cocido, podéis ahorraros el trabajo de cocinar este plato. También podéis retirar la carne a los 10 minutos de cocción y seguir cocinando el plato (la salsa) por separado.
En cualquier caso, no quería dejar pasar la oportunidad de plasmar la auténtica elaboración de esta receta tradicional catalana, (si me permitís) más allá de los gustos personales. ¡Vamos!
1,2 kg de atún fresco en un corte
3 tomates maduros
1 cebolla media
1/4 de litro de vino blanco
Laurel, tomillo, romero y perejil
pimienta negra
aceite de oliva
sal
Variantes:
Podéis acompañar el plato con arroz blanco
Preparad las verduras y las hierbas.
Preparad el atún también.
Lo primero que tenéis que hacer es ponerlo en remojo un rato, con agua fría. De esta manera perderá toda la sangre.
Pasada la horita, ya podéis picar la cebolla.
Ponedla a sofreír con un buen chorro de aceite.
Aprovechad también para rayar los tomates.
Si son maduros y de temporada mucho mejor, ya que la salsa de este plato es clave.
Reservadlo.
Salad la carne de atún.
Y pimentadla.
Cuando la cebolla haya cogido buen color...
poned el atún.
Dejad que se dore bien por ambos lados. En este tiempo, la cebolla también se habrá oscurecido más.
A continuación, echad el vino blanco en la cazuela.
Al mismo tiempo poned las hierbas.
Y el tomate.
Un poco de sal.
Y lo tapáis. Lo tenéis que dejar cocer unos 30 minutos. Si durante la cocción veis que puede faltar líquido, añadid un poco de agua.
Dadle la vuelta de vez en cuando.
Retirad la carne y las hierbas y lo reserváis.
Con una batidora dejad bien fino el caldo.
Se os espesará debido a la cebolla.
Verted la salsa por encima del atún.
Y ya lo podéis servir bien caliente en la mesa.
Cortad un trozo por persona, aunque ya sabéis que la carne de atún se desmenuza con facilidad.
Servid la carne con salsa y, si queréis, unas escamas de sal con pimienta negra.
¡Buen provecho!