Volvemos con una receta de las de toda la vida. Sin secretos, sin misterios, absolutamente sencilla. Pero cómo se disfrutan unas buenas costillitas rebozadas, ¿eh? Las podéis acompañar con unas buenas patatas fritas, pero bien fritas, claro está.
Y la salsa... pues la que más os guste. Podéis acompañar las costillitas con un buen alioli, una salsa barbacoa, un ximixurri, una clásica mayonesa o, incluso, un "ketchup".
16 costillas de cabrito
harina
3 huevos batidos
pan rallado
sal
aceite para freír
Variantes:
- Se pueden acompañar de judías hervidas o patatas fritas
- Se puede añadir un poco de ajo y perejil picado
- Se pueden acompañar con mayonesa, alioli o salsa barbacoa
- Podéis añadir un poco de levadura en polvo al rebozado
Empezaremos por calentar una buena cantidad de aceite para freír. Primero haremos las patatas y en el mismo aceite freiremos las costillitas. Cortad las patatas a vuestro gusto. Yo hoy las he hecho así, como medias lunas.
Lavamos bien las costillas de cabrito.
Son pequeñas... pero da gusto morderlas con los dientes.
Preparamos también un par o tres de huevos con un poco de sal. Los batimos bien.
Preparamos un plato con harina...
... y otro con pan rallado.
Cuando el aceite empiece a estar caliente -no demasiado- pondremos las patatas, y en esta primera fritura las freiremos a una temperatura no muy alta.
Cuando ya estén blandas, que no doradas, las retiraremos y las reservaremos.
Ahora subimos la temperatura del aceite... y esperamos. Cuando esté bien caliente, volvemos a introducir las patatas.
Enseguida cogerán color y quedarán bien crujientes por fuera... y cocidas por dentro. Bajad la temperatura un poco para la carne.
Las salamos y las reservamos.
Salamos la carne.
Enharinamos las costillas.
Seguidamente, las pasamos por huevo batido...
... y a continuación las rebozamos con pan rallado.
Ya las podemos ir friendo.
Las iremos haciendo por ambos lados.
Hasta que tengan buen color... y las vamos reservando sobre un papel absorbente.
Si os gusta, podéis añadir una o dos cucharaditas de ajo y perejil picados con aceite.
Lo podéis mezclar con el huevo batido y hacer el mismo proceso.
Servid las costillitas bien calientes.
Podemos tirar una pizca de perejil por encima si queréis.
Y ya lo podemos probar.
Están bastante buenas, la verdad.
Lo que os decía: se tienen que rebañar bien... y se tienen que comer con las manos.
¿Un poquito de mayonesa?
¡Buen provecho!