Cocinar con wok puede llegar a convertirse en una auténtica obsesión. Esta forma de cocinar con poco aceite, fuego muy fuerte y cocciones rápidas proporciona al cocinero una sensación de productividad y eficiencia que se vuelve adictiva. Cocinar con wok es divertido, y engancha. En este caso, a pesar de tener un buen wok, creo que, para pequeñas cantidades, también van muy bien estas sartenes con mucha profundidad de aluminio forjado, que reparten muy bien el calor y, al ser más pequeñas, todavía generan más temperatura que un wok.
Por otra parte, y como vimos en la receta de los Cangrejos con jengibre y cebollino, hoy utilizaré un sofrito propio de la región de Shaoxing. El sofrito típico de aquella zona se hace con jengibre, ajo y chile picado, junto con un chorro de vino de Shaoxing. Esta es la base de muchos platos asiáticos, tal como hacemos nosotros con el sofrito de toda la vida. Espero que os guste... yo me he lamido los dedos durante un buen rato.
1 chorro de vino de arroz Shaoxing o jerez seco (Hua Tiao Wine)
6 o 8 cigalas frescas de medida mediana
2 dientes de ajo picados
un trozo de jengibre fresco picado
una cucharada de harina de maíz "maizena" (almidón)
aceite de oliva
agua
Variantes:
Podéis añadir un poco de chile (o guindilla picante) al sofrito
Podéis presentar el plato con un poco de cebollino fresco picado por encima
El perejil es opcional
Preparamos los ingredientes.
El vino de Shaoxing lo encontraréis en cualquier tienda de alimentación asiática.
Todo legal, ¿eh?
Primero de todo pelaremos el jengibre.
Sólo un trozo.
Lo mismo con el ajo...
... bien picadito.
Ahora, prepararemos un vaso con un poco de agua...
... menos de medio vaso.
Le tiraremos una cucharada de harina de maíz.
Que quede bien disuelta.
Picad también un poco de perejil fresco.
Seguidamente, pondremos a calentar el wok o la sartén honda. Mientras tanto, salaremos las cigalas.
Echaremos también un poco de pimienta.
Como tengo un wok muy grande, cuando quiero hacer una ración pequeña utilizo esta sartén honda que coge mucha temperatura y también me va bien. Echaremos un chorro de aceite de oliva.
Y saltearemos el marisco.
Dadle unas vueltas.
Cuando cambie de color los reservaremos.
En el mismo aceite, tendremos que dorar el ajo picado.
Al mismo tiempo tiraremos también el jengibre, pero rápido. ¡Como podéis ver, está tan caliente que casi no me da tiempo ni de hacer las fotos! ¡Que se me quema!
Y lo removemos. Cuidado que el ajo se quema con facilidad con altas temperaturas.
Ponemos un poco de perejil.
Un par de vueltas más y...
... verteremos un tapón de vino de Shaoxing. Si no tenéis, podéis utilizar Jerez seco.
Muy bien.
Cuidado con la reacción, se puede encender la sartén.
Dejadlo reducir unos instantes.
Volvéis a poner las cigalas. Aseguraos de que quedan bien impregnadas con el sofrito.
Y para acabar, verteremos el agua con el almidón.
Rectificamos de sal.
Esperad unos instantes hasta que la salsita espese.
Y lo serviremos directamente al plato, bien caliente.
¡Hacia la mesa, chicos!
Un plato exótico con el cual os lameréis los dedos.
¡Buen provecho!