Hoy os presento una versión de la auténtica la "Escudella y carn d'olla" catalana, más sencilla, con menos ingredientes y, por lo tanto, menos calórica. Caldos y cocidos, hay tantos como personas, ya que todos le ponemos o le sacamos alguno de los muchos ingredientes que incorpora este plato. En consecuencia, en cada casa, en muchas ocasiones queda ligeramente diferente. Yo la hago a menudo, esta versión. Al tener niños pequeños me veo obligado a hacer la escudella una vez al mes, incluso en verano. Entonces, lo congelo y lo voy sacando entre semana. Notaréis que el caldo coge un tono más rojizo, que me gusta, debido a de incorporación del chorizo. Por este motivo, esta receta incorpora el chorizo entre los ingredientes principales, y la receta tradicional solo lo incorpora como posible variante.
Y también, la variante que se hace por Navidad, la "Escudella y carn d'olla" de Navidad, con aquellos "tiburones" (galets) enormes que se acostumbran a rellenar de la carne picada de la misma pelota. Si queréis conocer otra manera de preparar la sopa, os recomiendo leer la receta de "Sopa de caldo". ¡Vamos!
1/4 de gallina, del muslo mejor
1 trozo de ternera (conejo)
1 carcasa de pollo
1 hueso de jamón o un trozo de saín
2 huesos de ternera
200 g de garbanzos cocidos
1 trozo de chorizo
1 trozo de butifarra negro
2 patatas
hierbas para el caldo (apio, puerro, 2 zanahorias, chirivía, nabo, etc.)
1 pelota (200 g ternera + 200 g carne magra cerdo + ajo + perejil + sal + pan remojado con leche + 1 huevo + enharinado)
Variantes:
Podéis añadir patas de pollo, oreja de cerdo, morro, cola de ternera, costilla, etc.
Si utilizáis garbanzos en remojo... los tendréis que poner al principio de la cocción
Las hierbas para el "caldo" que no falten. Las lavamos bien.
La zanahoria.
¡Arghhhhh!... ¡un ratón en la cocina!
¡Ah!, no, es un nabo! ¡jeje, qué tonto!
Ponemos el nabo (limpio de raíces).
La chirivía.
El puerro, bien limpio... que siempre tiene arena.
Y ahora la carne... también bien limpia.
Un hueso de jamón que haga el caldo blanco (salado).
A mí me gusta poner dos huesos de jamón... uno con carne.
Si tenéis patas de pollo... también.
Los huesos de ternera.
El cuarto de gallina.
Y cómo no... agua hasta cubrirlo todo sobradamente.
Yo acostumbro a poner 10 litros de agua... ya tengo una marca hecha, jeje.
Lo removemos un poco... tiramos una pizca de sal y lo dejamos cocer a fuego medio durante un par de horas.
Vuestra casa empezará a hacer aquel entrañable olor casero... de dónde se come bien, jeje. De tanto en tanto, ir sacando la grasa sucia y fea que aparecerá en la primera capa de la olla.
Si veis que falta agua... podéis añadir más, pero caliente. En total, el caldo tiene que hervir entre 2 y 3 horas.
A la última media hora de cocción será cuando incorporemos la patata, la pelota, el chorizo, los garbanzos cocidos y la butifarra. La pelota yo la hago previamente (mezclando la carne con el huevo, el ajo y perejil y el pan remojado en leche) y la guardo en la nevera con papel de film.
A mí el chorizo me gusta que sea seco.
Una vez hecho el caldo, colarlo y hacer la sopa con la pasta, y el cocido servirlo aparte.
Esta es la medida que me gusta de pasta, tradición familiar, chicos. Ya lo he comentado antes.
Los añadimos a nuestro caldo.
Lo dejaremos cocer hasta que estén los tiburones cocidos. Rectificad de sal en este punto.
En una bandeja grande, podemos emplatar el cocido.
Este choricillo es la bomba.
La pelotita... la carne de ternera que se deshace....los garbanzos cocidos....¡fuassss! Servíos un poquito de todo en el plato....y disfrutad. Si os sobra mucha pelota del caldo podéis hacer "Pelota rebozada".
¡Es un manjar de dioses!
¿Qué colorete, eh? ¡Y aquí tenéis un caldo bueno de verdad!... ¡gracias madre por estas recetas tan especiales!
Para nosotros, estos tiburones son los mejores.
Ummmm... qué olorcito. Por cierto, también podéis hacer la "Sopa de caldo" con trozos de gallina o pollo y un sofrito.
Yo siempre acostumbro a hacer "caldo" de más. Lo congelo en botellas pequeñas y me sirven para hacerle sopitas a mis hijos, o también para elaborar otros platos que requieran de caldo de pollo.
¡Buen provecho!