Seguimos aprovechando la temporada de setas con una nueva receta que combina pasta con níscalos frescos. Podéis utilizar otras setas y otro tipo de pasta, pero es importante utilizar tomates secos y conservados en aceite, ya que este será el ingrediente que más caracterice el plato, por su sabor intenso y peculiar. Su elaboración no es nada complicada. Claro, es muy fácil decirlo, ¿verdad? Si os apetece, el sofrito, que haremos con trocitos de níscalo lo podéis triturar y convertir en una crema añadiéndole un poco de caldo o crema de leche, y de esta manera podréis ofrecer un acabado más sofisticado. Yo he apostado por la versión más chapucera, si así le podemos decir, ya que también me gusta encontrar trocitos en el sofrito.
300gr. espaguetis
300gr. níscalo fresco
2 tomates maduros rayados
1 cebolla picada
medio puerro picado
pimienta negra
una cucharada pequeña de orégano seco
una ramita de tomillo fresco
queso emmental rayado
2 hojas de laurel
3 dientes de ajo
perejil fresco
aceite de oliva
sal
Variantes:
- Podéis utilizar otros tipos de seta
- Podéis utilizar otra pasta como tallarines o mafalde
- Podéis descartar el uso del tomillo fresco
Preparamos todos los ingredientes.
Limpiamos bien las setas, que hoy estan especialmente sanas.
Lo picaremos un poco, pero dejaremos trozos más bien grandes.
En una cazuela con un buen chorro de aceite de oliva... sofreiremos la cebolla bien picada.
Al mismo tiempo, y si tenéis, podéis poner la ramita de tomillo para aromatizar el aceite.
Perfecto.
Mientras se hace la cebolla, iremos cortando las setas. Reservaremos dos o tres níscalos enteros por persona, para decorar el plato. El resto, todo picadito.
Ya podéis retirar al romero, que conservaremos para decorar en el plato, si queréis.
Al mismo tiempo las setas.
Lo removemos todo junto y lo dejamos cocer unos 4 o 5 minutos.
Seguidamente añadimos el tomate rayado que dejaremos cocer unos pocos minutos más.
En este punto, podéis añadir un poco de orégano seco.
Como una cucharada de café aproximadamente. Le aportará un toque muy interesante.
Dejad que el tomate coja color y se integre bien con el sofrito. Saladlo un poco.
En unos 10 minutitos lo tendréis al punto. Lo reservamos.
Ahora, paralelamente, pondremos abundante agua con sal y laurel a hervir.
Cuando arranque el hervor, pondremos los espagueti, que coceremos unos 10-12 minutos.
En otra sartén con una chorro de aceite de oliva... echaremos una pizca de ajo y perejil fresco picadillos.
Encima, pondremos las setas enteras que teníamos reservadas y dejaremos que se hagan bien.
Cuando empiecen a dorarse ya los tendremos a punto.
Una vez los espagueti estén cocidos y escurridos, los incorporaremos directamente al sofrito que teníamos reservado.
Lo removemos todo junto y lo calentamos un rato más. Cuidado que no se os queme.
Ya podemos emplatar. Pondremos una primera capa de espagueti... un poco de sofrito...
... una nueva capa de espagueti... y más sofrito.
Acabaremos poniendo un poco de queso emmental por encima... y decoraremos con los níscalos. Echad un poco de pimienta negra por encima de todo el conjunto.
Y aquí tenéis el plato acabado.
Si queréis podéis añadir un chorro de aceite de oliva en crudo por encima.
Ummm... qué olorcita que suelta el níscalo fresco, ¿eh?
No hay que decir que este plato se tiene que acompañar de un excelente vino tinto.
¡Buen provecho!