Es curioso como con pocas variaciones un mismo plato adquiere sabores diferentes. Podéis incorporar ñoras, una picadita, con pan frito, o utilizar otro tipo de pescado, o de patata, o de almeja, o de caldo... podéis añadir especias de todo tipo... y al final al final... un mismo plato queda bastante diferente.
1 merluza fresca cortada en rodajas
200gr. almeja grande fresca
3 tomates maduros rayados
4 ajos
2 patatas grandes
1 cebolla picada
aceite de oliva
perejil
unas briznas de azafrán
un vaso de vino blanco
caldo de pescado
sal
Variantes:
- Podéis utilizar otros pescados como dorada, lubina, rodaballo, etc...
- Podéis incorporar una picada de frutos secos y pan frito
- Podéis incorporar la carne de una ñora en el sofrito
Este plato se puede hacer con merluza o con otros pescados similares.
Limpiamos bien todo el pescado.
Picamos la cebolla y el ajo en láminas.
Rayamos los tomates.
En una cazuela baja y ancho... sofreiremos el ajo y la cebolla.
Mientras, podemos ir chascando las patatas, es decir, rompiéndolas para hacer salir el almidón.
Cuando la cebolla y el ajo estén dorados... añadiremos unas briznas de azafrán.
También un par de hojas de laurel... y lo removemos un poco.
En el tomate, tiraremos una cucharada grande de pimentón dulce ( o picante si queréis).
Incorporamos el tomate.
Lo removemos todo y dejamos que reduzca un poco el agua del tomate hasta que caramelice el sofrito.
Ahora, incorporamos las patatas.
Le damos unas cuantas vueltas, que se impregnen bien. Removedlo durante 5 minutitos, evitando que se queme.
Echaremos la copita de vino blanco.
Lo tapamos y lo dejamos reducir unos 7-8 minutos también.
Empezará a hacer aroma del bueno ya.
El caldo de pescado ya lo tenemos hecho.
Cubrimos las patatas con el caldo de pescado. Se puede hacer con agua directamente, pero no queda tan bueno.
Lo salamos un poco, claro.
Lo tapamos. Las patatas estarán blandas pasados unos 25-30 minutos. Vigilad que no falte caldo.
Pasado este tiempo... y con las patatas completamente hechas... ya podemos incorporar el pescado.
Con cuidado, lo distribuiremos bien por la cazuela.
Perfecto.
Sacudid un poco la cazuela para repartirlo bien.
También es el momento de incorporar las almejas, bien limpias.
Las repartís.
Picad un poco de perejil fresco.
Lo añadís también.
Ahora es cuestión de taparlo... y esperar a que se abran las almejas... unos 4-5 minutitos.
Sacudidlo más.
Cuando las almejas estén abiertas, el pescado también estará cocido. Ya sabéis que la merluza necesita poco calor para hacerse.
¿Y ahora qué faltaría?
Efectivamente, tostar un poco el guiso en el horno.
Ponedlo unos 5 minutitos a 200 grados... en modo grill.
¿Qué color que coge, eh?
Ya lo podemos llevar a la mesa y servir bien caliente.
Montamos un plato, bien lleno... con un poco de todo... y mucho caldito.
¿A que tiene buena pinta?... y que olorcita.
Tenedor, cuchillo y cuchara... ¿eh?
Qué bueno... combinar pescado con patata y caldito.
Lo tendremos que acompañar de un buen vinito fresco. Bien fresco.
¡Buen Provecho!