Lo que yo pensaba que era una forma de comerme el "músico"... ha resultado ser una receta. Como receta, no tiene demasiado contenido, ciertamente. Pero tiene el mismo derecho a aparecer en cualquier recetario que otras recetas más elaboradas. ¡Y qué buenas están!
Una excelente combinación que, servidas de postre y acompañadas con una copita de mistela o moscatel, resultan ideales para la conversación relajada de sobremesa. De aquellas cositas que nos hacen compartir momentos agradables mientras las comemos.
Los frutos secos, en general, son muy energéticos y ricos en grasas, pero también nos aportan muchas vitaminas, fósforo, magnesio, hierro y ácidos grasos como la Omega 3, por muy conocidos. Por lo tanto, es importante comer frutos secos de forma moderada.
un manojo de almendras tostadas
un manojo de nueces peladas
un manojo de higos secos
Variantes:
Lo podéis acompañar de mistela o moscatel
Se puede servir montado o sin montar
Podemos servirlo en un plato, directamente, y que cada uno se sirva. Pero también lo podemos hacer un poco más bonito.
Sacáis la cola de los higos, que no se come.
Introducid una nuez entera dentro del higo procurando que quede media nuez fuera.
Ahora, pelad algunas almendras tostadas.
Y haced la misma operación.
Presentadlo combinando unos higos de nuez con otras de almendra.
Lo podéis acompañar con un chorrito pequeño de moscatel.
Si incorporáis avellanas y pasas... el postre se convertirá en un Postre de músico.
¡Buen provecho!