A veces, nos hacemos un lío pensando qué podemos hacer para comer, y platos como el de hoy son una gran alternativa, fácil de elaborar, bueno y muy tradicional también.
Hoy hablamos de las Judías con lomo, que no Lomo con judías. Esta pequeña diferencia en la orden de los elementos es relativamente importante: no es lo mismo servir el lomo con un acompañamiento de judías que servir las judías con unos trozos de lomo. ¿En qué se traduce eso? Pues que en vez de hacer el lomo y colocar las judías a un lado, como guarnición, lo que haremos será cocer el lomo, después las judías y finalmente mezclarlo y servirlo todo.
Preparamos los ingredientes.
Es preferible utilizar lomo de dos colores, más tierno y sabroso.
La judía, podéis prepararla previamente o comprarla ya cocida.
Picaremos el ajo y el perejil juntos.
Ahora, mientras ponemos una sartén con aceite a calentar, salaremos la carne.
También lo pimentaremos.
No es necesario sin embargo, si queréis, podéis poner 2 dientes de ajo y lo dorais con el aceite. De esta manera aromatizaremos la grasa y la carne cogerá más sabor. Retiradlos antes de que se quemen.
Freímos el lomo de cerdo con el aceite bien caliente.
Dejadlo un rato, hasta que coja color dorado. Entonces, dadle la vuelta a la carne.
Tengáis-lo el tiempo justo. Ya sabéis que el lomo enseguida queda seco. Reservadlo.
Ahora, en el mismo aceite de freír la carne, saltaremos las judías hervidas.
Removedlas un poco, que os cogerán color enseguida.
Un poco de perejil...
... un poco de sal...
... e incorporamos el lomo a la sartén.
Dejad que se haga todo durante un par de minutos.
Y ya lo tenemos. ¡Todo el mundo a comer!
¡Buen provecho!