Una nueva receta tradicional catalana que os hará lameros los dedos. Receta básica, pero buena. Y lo mejor de todo es que sólo necesitaréis 15 minutos para hacer este plato: la mitad para prepararlo y la mitad para cocerlo.
Servid los langostinos calentitos, del horno a la mesa y, si os apetece, tirad por encima un poco de ajo y perejil. Como siempre, si son frescos y grandes mejor. Yo compro del tipo "tigre", variedad gigante, marrón o verde, aunque también podéis hacer la misma receta con gambas o carabineros. Este es un plato que podéis hacer en cualquier época del año, pero que entra especialmente bien en verano. ¿A qué sí?
1 kg de langostinos
sal gruesa
aceite de oliva
Variantes:
Se pueden servir con ajo y perejil
Podéis acompañarlos de la salsa que más os guste
Lavad los langostinos.
Es importante que tengan una buena medida.
Ahora, esparcid sal gruesa.
Que quede bien repartida.
Encima, colocad los langostinos de forma equidistante para garantizar una cocción regular.
Un chorro de aceite de oliva por encima, que no falte.
Ya lo tenemos preparado. Calentad el horno a unos 200 grados.
Poned la bandeja en el horno hasta que los langostinos estén cocidos, que dependerá de la medida pero serán unos 7-8 minutos.
Pasado este tiempo, notaréis que han cambiado de color.
Ya los tendréis a punto para comer.
Ponedlos bien calientes en un plato.
Si os apetece, triturad un ajo con un poco de aceite, sal y perejil.
Tiradlo por encima de los langostinos.
Y ya lo podéis servir a la mesa.
¡Buen provecho!