¡Hola de nuevo amigos de la buena cocina! Aquí tenéis una receta muy sencilla pero muy buena, realmente impresionante, lomo de cerdo a la naranja. Se trata de un plato muy "resultón", ya que sale muy bien de precio, es muy fácil de hacer y además, acompañado de un buen puré de patatas, será la admiración de todos vuestros invitados. Como podréis imaginar, se trata de un plato con un sabor final agridulce muy agradable y sorprendente, teniendo en cuenta el sencillo que resulta preparar.
1 caña de lomo de cerdo (1 kg aprox.)
2 kg de naranjas para hacer zumo
1 vasito pequeño de brandy
aceite de oliva
pimienta negra
sal
Inicialmente, tenemos que preparar el zumo de naranja natural. Exprimimos los dos kilos de naranjas. Reservar.
Salamos y pimentamos el lomo al gusto y lo ponemos en una cazuela con un poco de aceite para hacerlo un poco por fuera. Le damos un par de vueltas para que se haga por todas partes.
Es el momento de preparar un vasito pequeño de coñac para flamear la carne. Añadimos el coñac a la cazuela y procedemos a flamear con mucho cuidado de no quemarnos las cejas... una vez flameado, añadimos poco a poco todo el zumo de naranja. Es importante que el zumo cubra el lomo hasta la mitad.
Dejamos hacer el lomo con el zumo de naranja poco a poco a fuego medio, dando la vuelta a la pieza de carne y bañando la carne de zumo con un cucharón de vez en cuando. Si queréis podéis hacer pequeñas incisiones en la carne con un cuchillo para que el zumo penetre dentro de la carne más fácilmente.
Pasados unos 30 minutos, la carne habrá reducido de tamaño y el zumo también.
Ahora es el momento de sacar la carne de la cazuela y cortarla en trocitos con un buen cuchillo. Estos trozos es volverán a incorporar en la cazuela. Como podéis ver, la carne está bien hecha por dentro, pero todavía queda para hacer el proceso más interesante de esta receta: la caramelización del zumo de naranja.
Para continuar, añadimos toda la carne y subimos el fuego un poco. A partir de ahora tenemos que ir con cuidado y controlar el proceso para que la carne se haga bien y no se queme.
La caramelización se produce rapiñadamente, en unos 15 minutos tenemos el zumo muy reducido y podremos ver que se oscurece de color, cogiendo un agradable color de caramelo.
Podemos añadir un poco de agua si se queda seco durante la cocción final, pero si hemos añadido el zumo de naranja adecuado por la cantidad de carne, no será necesario. Finalmente, obtenemos un lomo nada seco, muy sabroso y muy original, con una salsita agridulce muy buena.
Se recomienda acompañarlo con un buen puré de patatas. ¡Buena cocina!