Otro plato de pasta por hacer entre semana. El secreto de estos macarrones está en la salsa boloñesa que, evidentemente, estará hecha en casa. Por lo tanto, os recomiendo la lectura previa de la receta Salsa Boloñesa. Muy buenos, de verdad. Nada que ver con unos vulgares macarrones con salsa de tomate de bote. En cualquier caso, unos macarrones siempre entran bien, ¿a que sí?
400 g de macarrones
2 hojas de laurel
aceite de oliva virgen extra
salsa boloñesa
pimienta negra
queso parmesano o emmental
sal
La salsa boloñesa ya la tendremos preparada previamente.
Aparte, pondremos a hervir abundante agua con sal.
Un par de hojas de laurel.
Cuando hierva, añadiremos los macarrones.
Los dejaremos hacer el tiempo que nos indique el fabricante, que puede ir entre 8-10 minutos aproximadamente.
Escurrimos la pasta. No tiréis agua fría para evitar que se enganchen, si queréis un chorro de aceite, pero nada más.
Ahora, mientras calentamos la salsa, emplatamos los macarrones.
Ponemos una buena cantidad de salsa encima.
¡Un chorro de aceite y a comer!
Si os gusta (a mí mucho), podéis tirar un poco de pimienta negra por encima.
Umm...
Si os sobra, lo podéis congelar sin problemas.
Y si los queréis gratinar...
¡Tirad un poco de queso por encima!
Tienen buena pinta así también, ¿verdad?
¿Los probamos? ¡Buen provecho!