Hoy os presento un plato de pasta bastante interesante... donde la combinación de la salsa de atún con los pimientos rellenos de queso "Peppersweet" hacen del plato una muy buena recomendación. Espero que os guste.
300gr. macarrones
3 latas de atún en aceite de oliva pequeñas
2 pimientos verdes
1 cebolla
1 bote de pimientos con queso "Pepersweet"
200gr. crema de leche o nata líquida para cocinar
200gr. salsa de tomate
2 hojas de laurel
pimentón
aceite de oliva
orégano
pimienta negra
sal
Variantes:
- Se pueden gratinar con queso
- Se puede incorporar una bechamel
Aquí tenemos los pimientos.
De hecho, se comen así mismo... y están deliciosos.
Por debajo, tienen la típica forma del pimiento.. ¿son supermonos, eh?
Preparamos el atún.
Picamos los pimientos y la cebolla.
En una sartén con un buen chorro de aceite de oliva... sofreiremos el pimiento verde y cuando coja color pondremos la cebolla.
Cuando la cebolla y el pimiento ya tengan color... incorporamos el orégano.
Es interesante que no haya líquido todavía... así el orégano se tostará un poco y haremos salir todo el aroma.
Pasados un par de minutos removiendo el orégano... incorporamos el tomate frito.
Lo removemos bien... e incorporamos una cucharada generosa de pimentón dulce.
Mezcladla bien... hasta que parezca que se engancha.
Ahora, echamos la crema de leche o nata... y lo removemos.
Lo salamos al gusto.
Lo removemos un poco y dejamos que hierva 3 o 4 minutos. Paramos el fuego y reservamos.
Por otro lado, ponemos a hervir la pasta, con un par de hojas de laurel, sal y un poco de aceite.
Una vez cocida la pasta "al dente"... sacamos el agua.
Podéis aprovechar la misma cazuela de hervir los macarrones (sin agua, se entenda)... verter la salsa que hemos hecho en la sartén... y encima... incorporamos los macarrones.
Ahora, lo removemos bien.
Y ya lo tenemos casi listo.
Preparamos un plato para emplatar. Yo he utilizado un molde redondo, pero en este caso va mejor uno cuadrado.
¿Que nos queda, pues?... saltear en una sartén con dos gotas de aceite... nuestros pimientos.
Añadidlos al plato... con una pizca de orégano y un chorro de aceite.
Y ya los podéis servir, bien calentitos.
Muy buenos, de verdad os lo digo... y económicos, también.
El queso fresco combina a la perfección, claro.
Acompañad el plato de un vino tinto con carácter.
¡Buen Provecho!