Hace tiempo vimos como preparar una auténtica salsa boloñesa... de aquellas buenas buenas, nada que ver con las que podéis comprar hechas. Os recomiendo leer esta receta previamente. Hoy os presento otro plato de pasta, en concreto "Mafalde" que son una especie de cintas rugosas muy curiosas. Un delicioso plato de pasta.
Para dar más volumen al plato, lo he acompañado con un crujiente de parmesano. Espero que os guste la propuesta de hoy.
500 g de salsa boloñesa
300 g de pasta "Mafalde"
aceite de oliva
2 hojas laurel
sal
parmesano en polvo
Partiremos que ya tenemos hecha la salsa boloñesa. Os aconsejo la lectura previa de esta receta.
Pondremos un buen cucharón por persona a calentar.
A fuego bajo, que no se nos queme.
Ahora pondremos a hervir la pasta.
Tiene una forma curiosa...
...y queda bastante buena. Es de las pastas que piden a gritos ser cocida "al dente".
La ponemos a cocer en agua hirviendo con sal, un chorro de aceite y laurel. Estará hecha en 8-10 minutos (al gusto).
Mientras se hace la pasta y se calienta la salsa, calentamos el horno a 200 grados y preparamos una bandeja con una hoja de papel cuisson.
Vertemos queso parmesano.
... y lo repartimos bien con la mano.
Lo ponemos a cocer hasta que esté tostadito. Cuidado no se os queme o tendrá mal sabor.
Ahora, lo dejamos enfriar y enseguida veréis cómo se pueden romper trozos grandes.
... y finos.
La pasta ya está cocida. A mí me gusta servirla inmediatamente y evitar enfriarla con agua fría, recalentarla etc. Procurad calcular el tiempo y servir la pasta al momento.
Pues emplatamos, un poco de pasta, la salsa por encima, un poco de cebollino... el crujiente de queso... y una pizca de pimentón para decorar el plato...
¡Ah!... y un poco de pimienta negra por encima.
¡Buen Provecho!