Hoy veremos como preparar un magret de pato con un estofado de frutos rojos. Los frutos rojos los podéis encontrar congelados todo el año en las tiendas, así como el magret mismo. Si encontráis frutos rojos naturales mucho mejor, no hace falta decirlo. La particularidad de este plato es la cocción del magret y el tipo de salsa que lo acompaña, habitualmente dulce. Podéis preparar una con ingredientes como la naranja, las frambuesas, los higos, etc, pero siempre se recomienda hacer una reducción con azúcar o vinos dulces del tipo del Oporto, Moscatel o Pedro Ximenez.
La textura de la salsa va a gustos. Se puede hacer más o menos espesa. También podéis licuarla añadiéndote la grasa que suelta el pato, aunque yo no recomiendo esta última práctica debido a su alto contenido en grasas saturadas.
estofado de frutos rojos
1 magret de pato
sal en escamas (tipo "Maldon")
Como os comentaba, previamente prepararemos el estofado de frutos rojos.
Una vez lo tenemos, lo podemos triturar con una batidora eléctrica para dejarlo más fino.
Si os molestan las semillas también se puede colar. Reservamos este estofado.
Ahora, el magret.
El magret se caracteriza por tener una piel muy grasienta y gruesa al mismo tiempo.
Para facilitar la cocción haremos unos cortes al sesgo sobre la grasa sin llegar a tocar la carne.
A continuación, haremos lo mismo en la dirección opuesta procurando que nos queden dados de grasa.
En este punto, ya podéis poner a calentar la plancha. Pimentad el magret.
Con la plancha muy caliente, empezaremos la cocción del magret por la parte de la grasa.
Enseguida notaréis que suelta mucha grasa.
Tenéis que tenerlo entre 6 y 8 minutos.
Pasado este tiempo obtendremos una capa crujiente de grasa.
Toda esta grasa, como os comentaba en la introducción, se puede aprovechar para la salsa, pero yo no lo recomiendo por cuestiones de salud.
Seguidamente, ponemos a cocer el magret por el otro lado.
y lo tendremos de 2 a 4 minutos, según los gustos.
Podéis comprobar la cocción haciendo un pequeño corte.
El magret tiene que quedar prácticamente crudo por dentro y bien dorado por fuera.
Esta es una magnífica cocción. Cortadlo a vuestro gusto.
Emplataremos directamente. Pondremos una capa de estofado de frutos rojos...
y encima el magret con un poco de sal en escamas.
Servidlo inmediatamente.
Sólo nos quedará buscar el mejor maridaje para un plato bastante especial.
¡Buen provecho!