Con anterioridad, en este blog, ya hemos visto como hacer algunas monas. Esta vez veremos como hacer una mona de trufa cocida o trufa oscura... que la llaman en las pastelerías. No es complicada de hacer, solo tendréis que ser previsores y preparar alguna cosita el día antes. Esta es una mona que gusta especialmente a los niños. Al fin y al cabo... veréis como, para que quede bonita una mona, solo hay que tener un poco de gracia y, porque no decirlo, un mínimo de técnica... pero los ingredientes ya veis que son bastante sencillos de hacer.
El relleno puede ser de cualquier mermelada que os guste... de crema o, incluso, de la misma trufa cocida. Por cierto, se le dice trufa cocida u oscura para diferenciarla de la trufa clara que se hace montando nata. Como veréis, me centro única y exclusivamente en el pastel... no en las figuras de chocolate... de las cuales hablaremos pronto, así como del tratamiento de la cobertura. Pero si no os queréis complicar la vida... yo recomiendo hacer el pastel y comprar la figura de chocolate... que, al fin y al cabo, solo hace falta un molde para hacerla. Vamos... ¡Y buena Pascua!
1 bizcocho
500gr. de trufa cocida (ganaché)
azúcar baño (almíbar + brandy)
mermelada de melocotón
almendra en grano tostada
bolas de chocolate blanco para decorar
Como ya os he comentado, tenemos que tener hecha la trufa cocida, el bizcocho y el almíbar. Ahora vamos a dorar la almendra en grano.
La ponemos en una bandeja para el horno y lo esparcimos bien.
Pero id con cuidado, que se quema rápidamente. Lo tenéis que ir removiendo de vez en cuando.
Cuando esté, en general, doradita... ya la podemos dejar enfriar.
El bizcocho casi está cocido. Os recomiendo ver esta receta previamente.
Estos moldes de silicona van bastante bien, y no hace falta mojar con mantequilla y enharinar el molde.
Como podéis ver, no se engancha nada.
De este bizcocho cuadrado he hecho dos monas.
Empezaremos por retirar la parte oscura del bizcocho, ya que no es agradable al paladar.
La parte superior también la retiramos.
Todo eso que sacamos no lo tiramos. Lo podemos guardar para hacer un púdin de manzana.
Ahora, serraremos el bizcocho por la mitad, para poder rellenarlo.
Dejamos las dos capas separadas.
Removedlo bien.
Y ahora bañamos la parte inferior del pastel...
... podéis bañar la mitad con licor y la otra mitad sólo con almíbar... para los niños.
Rellenaremos esta mona con mermelada de melocotón, muy buena de sabor.
Y como siempre está un poco fría, hay que trabajarla un poco antes de repartirla.
Ponemos una buena cantidad encima y con la paletina la escudilleamos.
Haced una capa normalilla, no os paséis. Poner más no significa que quede mejor.
Cubrimos el pastel con la parte superior de bizcocho y lo bañamos de la misma manera.
Ahora, calentamos la trufa cocida que preparamos... hasta que quede untable, como una especie de "Nocilla".
Necesitaremos un plástico con dientes para decorar el pastel. Lo podéis hacer vosotros mismos.
Ponemos la trufa encima...
Los laterales también.
Procurad poner la cantidad adecuada, ni demasiado ni demasiado poco.
Ahora, con un poco de gracia hacemos unas "aguas" con el plástico dentado.
Repasad las esquinas un poco.
Ayudaos de la paletina.
Finalmente, poned el pastel encima de un cartón con blonda. Reservadlo a la nevera para cuajar la trufa.
Preparad una manga pastelera con trufa... y decorad la mona a vuestro gusto.
Yo he hecho unas rosas con un cornete estriado... y unas bolas con un cornete liso.
Este es el momento más bonito de un pastel... ¿la decoración, verdad?
Muy bien.
Esto hace mucho contraste con la trufa... y queda bonito, ¿verdad?.
Pues ya tenemos la mona hecha.
Ahora sólo queda empezar a poner cosas...
... que si un polluelo... que si unas plumas...
... ¡y una figura de chocolate, claro está!
¿Qué tal?
¡Yo creo que a los niños les gustará mucho!
Las figuras de chocolate... son caras... pero más caros pagaréis los moldes si la queréis hacer vosotros.
Por cierto, podéis hacer un circulo de trufa para garantizar la estabilidad de los muñecos que ponéis.
Por dentro ha quedado muy esponjoso.
¡Buen provecho!