Hoy es el turno de esta receta tradicional catalana. De aquellas clásicas, que no parecen gran cosa, pero que cuando las pruebas te sorprenden y mucho. Es la magia de la cocina. No dudes en hacerla. ¡Un entrante que te hará quedar como el mejor anfitrión! ¡Vamos!
- 4-5 patatas con piel
- 200 g de panceta curada
- Pimienta negra
- 1 cabeza de ajos
- Perejil fresco
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal
Variantes:
- En lugar de tocino, se puede poner beicon frito.
- Se pueden añadir unas gotas de vinagre al aliño.
- Se pueden añadir trocitos de embutidos.

Te recomiendo utilizar patatas para cocer, bien limpias y con piel. Pero si te gusta más, las puedes pelar.

Coloca las patatas enteras en una bandeja de horno y mójalas con un poco de aceite de oliva.

Tira sal y pimienta.

Añade una cabeza de ajos pelada. Ponlo todo a asar al horno a unos 180-190 grados durante 20-25 minutos, o hasta que estén las patatas bien cocidas.

Mientras se hacen las patatas, prepara la panceta. Puedes cortarla en tiras finas, en trocitos, en dados, pero sin corteza.

Deja enfriar un poco las patatas para poder manipularlas.

El aceite de asarlas aprovéchalo y pásalo a la bandeja con la que servirás las patatas.

Córtalas en rodajas.

Repártelas y coloca un trozo de ajo cocido encima de cada trozo. Si lo prefieres, puedes echar un par de ajos picados en crudo por encima, o también ajo en polvo.

Sala las patatas y echa pimienta negra también.

Un poco de ajo y perejil picado por encima.

Y coloca la panceta por encima de las patatas.

Pon esta bandeja al horno hasta que el tocino quede crujiente.

Y ya las puedes servir. ¡Buen provecho!