Los que conocéis la versión original de este plato entenderéis por qué he hecho el esfuerzo de buscar una versión del plato rápida de hacer y que nos aporte prácticamente las mismas sensaciones. A buen seguro que la mayoría habréis visitado un restaurante chino y, probablemente también habréis probado el pato a la pekinesa que ofrecen.
Pues bien, pensé hacer una versión casera del plato utilizando confit de pato de buena calidad. Los pancakes chinos cocidos al vapor si los he echado de menos (y que podéis comprar hechos también), pero os puedo asegurar que con rollitos tipos "fajita" funciona más que bien. Total, ya puestos a hacer inventos... ¿verdad?
Eso si, la salsa hoisin es el ingrediente que manda y es absolutamente imprescindible. La podéis encontrar en cualquier tienda de alimentación china, o por internet y os la traen en 24 horas a casa. Claro está, que como la cocina catalana no hay nada, pero de vez en cuando, por qué no, tenemos que disfrutar de la gastronomía foránea y, como en el caso de hoy, incorporarla a nuestro día a día haciendo nuestra propia versión. ¡Os atrevéis a probar estos rollitos! ¡Han quedado demoledores! ¡Vamos!
1 muslo de confit de pato por persona
1 bote de salsa Hoisin
2-3 rollitos de pan por persona
1 cebolla tierna cortada a tiras
1 pepino cortado a tiras
Variantes:
- Podéis utilizar otros panes o los auténticos pancakes chinos
Preparad los 5 ingredientes.
Cómo os digo en la introducción, esta salsa es imprescindible y su sabor determina el plato.
Lo primero que tenéis que hacer es poner a dorar el pato que ya viene confitado.
En esta lata venden 4 piezas, pero las podéis comprar por separado también. El precio aproximado por pieza es de unos 5-6eu.
Colocad los cuatro muslos en una bandeja de horno.
Verted todo el jugo y toda la grasa y ponedlo a cocer a unos 190 grados hasta que esté dorado por todas partes. Aprox. unos 10-15 minutos por lado.
Una vez hecho por una parte le dais la vuelta.
Perfecto, ya lo podéis sacar del horno y dejar enfriar un poco. Ya sabéis que este plato se come frío o a temperatura ambiente.
Mientras tanto, aprovechad para cortar la cebolla tierna.
Haced unas tiras finas y descartad las partes más verdes o más feas.
Ahora haced lo mismo con el pepino.
Descartad la parte interior del pepino y quedaos con la parte más firme. No importa si tiene un poco de piel.
Servid también la salsa hoisin debidamente.
Ya lo tenéis todo a punto, sólo falta el pato.
Desmenuzad los muslos de pato.
Perfecto, tenemos unos trozos más o menos grandes con poca grasa y de un pato de calidad. Ya podemos servirlo todo junto.
¿Y cómo se prepara el rollito?
Pues una buena capa de salsa sobre el pan, al gusto.
Unas tiras de cebolla tierna.
Ahora unas tiras de pepino.
Al gusto.
Y por fin, la carne de pato. No os paséis, que se pueda enrollar, ¿eh? ¡que os conozco!
Lo enrollamos. Cada uno como buenamente pueda. Yo ya tengo una cierta habilidad.
¡Y a comer!
¡Realmente buenos!
Si os va mejor con tenedor y cuchillo, adelante, total, esta versión ya lo permite todo, ¿verdad? jeje. ¡Buen Provecho!