¿Conocéis el pan de hígado? Es un embutido elaborado con hígado de cerdo y panceta. Según la Gastroteca, es un alimento muy energético, ríco en grasa y colesterol, pero al mismo tiempo ríco en proteínas de alto valor biológico y vitaminas del grupo B. Por el hecho de contener el hígado del cerdo, se convierte también en una excelente fuente de vitaminas A y D. También tiene un contenido importante de hierro. Dentro de siempre de una alimentación variada y equilibrada, su consumo ocasional es totalmente aconsejado.
50 g de pan de hígado
200 ml de leche evaporada
Pimienta negra
Sal
Variants:
Podéis sofreír un poco de cebolla o puerro e incorporarlo a la salsa.
Preparamos los pocos ingredientes de esta receta.
Como os comentaba, el pan de hígado tiene aspecto de paté...
... pero conserva la firmeza de un embutido.
De hecho, lo tenemos que pelar, también.
Cortaremos unas rodajas...
... que haremos en dados.
Colocamos los dados de pan de hígado dentro de un cuenco con un chorro de aceite y los doramos un poco.
No se desharán y cogerán un bonito color dorado.
En este punto añadiremos la leche evaporada.
Hasta cubrirlos.
Un poco de pimienta negra y dejamos cocer la leche.
Una vez arranque el hervor esperamos unos segundos...
... pasamos todo el contenido a un tarro para triturarlo.
Tiene que quedar bien fino.
Devolvemos esta salsa en el mismo cuenco y dejamos que reduzca más.
Tiene que hervir un rato, hasta conseguir una textura cremosa. Pero removedlo bien, que se pega con facilidad a la cazuela.
Lo rectificaremos de sal y ya tendremos la salsa hecha.
Cuando se enfríe cogerá un poco de piel, pero no pasa nada. La removéis y listos.
Y ya tenemos acabada la salsa de pan de hígado.
Como ejemplo os mostraré unos calamares en la plancha con salsa de pan de hígado.
¡Buen provecho!