Si lo consultáis por internet, hay varias maneras de hacer esta salsa, todas ellas válidas. Yo os propongo una de las recetas más básicas y que garantiza siempre un buen resultado. Como veréis, utilizaré una mezcla de caldo de pollo (que ya tenía hecho y congelado) y leche evaporada para dar cremosidad a la salsa. Podéis utilizar nata líquida o leche y ligarlo con un roux, pero la leche evaporada es ideal para garantizar untuosidad sin pasarnos con las calorías.
La pimienta tiene que estar en grano. Podéis poner más o menos, eso va a gustos, y a mí me gusta mezclar de la verde con la negra. Con las cantidades propuestas podréis acompañar cuatro o seis platos de carne, por ejemplo. Espero que os guste.
Un puñado de pimienta verde en grano
un puñado de pimienta negra en grano
200 ml caldo de pollo
200 ml de leche evaporada
un chorro de coñac
aceite de oliva
pimienta negra
sal
Variantes:
- Se puede añadir un chorro de salsa Viandox en el caldo
- Se puede hacer con caldo de carne (tostando los huesos) o verdura
- Podéis hacerla más cremosa añadiendo un roux
La pimienta, yo la pongo a ojo. Os dejo esta muestra gráfica.
Lo que haremos, antes de empezar, es calentar el caldo.
Paralelamente, pondremos un chorro de aceite de oliva en un cazo.
Echaremos los granos de pimienta.
Lo dejaremos tostar unos instantes. Un par de minutos, vaya, siempre removiendo, que no se queme.
¡A continuación, tendréis que rociarlo con un chorro de coñac, pero ojo! ¡La reacción es fuerte! Tened una tapa a mano por si se enciende y tiradlo muy poco a poco u os puede salpicar.
Una vez incorporado el coñac, la reacción bajará después de unos instantes.
El alcohol se habrá evaporado.
En este punto, añadiremos el caldo, poco a poco también.
Muy bien.
Y, seguidamente, verted la leche.
Salpimentad el conjunto.
Ahora, a fuego más bien bajo, dejáis que reduzca durante unos minutos. Removed de vez en cuando.
Vigilad no se pegue por la parte de abajo. Aquí tendréis que encontrar la textura que más os guste. Si os gusta más espesa podéis incorporar un roux o, sencillamente, una pizca de harina un poco tostada. Probadlo para rectificar y reservadla.
Os hará piel, seguramente, antes de servirla. Es normal, Removedla bien antes de llevar a mesa.
Si conviene, la podéis servir en una salsera.
Que siempre queda bonito.
Ummm...
Ya solo nos queda marcar un buen filete o turnedó de ternera.
¡Buen provecho!