Mousse de turrón de Jijona para Navidad

Preparamos todos los ingredientes.

Primero separaremos las yemas de las claras en recipientes diferentes.

Ahora, pondremos en remojo, en agua fría, las hojas de gelatina.

Ahora el turrón.

Con las manos, desmenuzadlo hasta dejarlo bien fino. Utilizaremos casi toda la barra para hacer la mousse.

Pero reservad una pequeña parte para poder decorar al final nuestro pastel.

Empezamos a montar las claras...

con el azúcar. Podéis añadir el azúcar a las claras cuando casi estén ya montadas.

Mientras tanto, prepararemos la base del pastel. La foto quizás os engaña, ya que no hace falta un bizcocho entero para hacer esta receta. Pero os quiero mostrar de dónde podéis obtener la base de bizcocho: de los recortes.

De lo contrario, podéis hacer una plancha expresamente para la ocasión.

Cogemos el molde y recortamos la parte sobrante de bizcocho.

Es aconsejable colocar un poco de papel de horno (cuisson) debajo, para poder manipularlo después.

Por otra parte, prepararemos el azúcar baño...

para bañar la base de bizcocho. Lo reservamos.

Recordad que tenemos las claras montándose. Ahora, en un cazo, pondremos la nata a calentar.

Cuando arranque el hervor la paramos.

Ahora, cogemos las hojas de gelatina...

Removedla bien hasta disolver completamente la gelatina.

que mezclaremos una vez se haya fundido. Lo reservamos. Ahora, batimos las yemas de los huevos un rato. Lo que se conoce como blanquear.

Añadiremos la mezcla de leche, gelatina y cobertura a las yemas.

Tiene que quedar bien ligado.

En esta mezcla le añadiremos el turrón desmenuzado.

Lo integraremos bien y lo reservamos.

Las claras ya están montadas.

Vertemos la nata dentro del bol, ponemos el azúcar correspondiente y...

la montamos.

Por fin, por una parte, tenemos la mezcla de yemas, gelatina, cobertura y turrón. Por otra parte, tenemos las claras montadas. Por otra, la nata montada y la base de bizcocho preparada. Nos queda el último paso: montarlo.

Primero de todo, no os olvidéis de reservar un poco de nata montada para hacer la decoración final.

Poned un poco de claras montadas en la mezcla de yemas...

y mezcladlo.

Ahora, mezclad dentro del cuenco el resto de claras con la nata, pero sin remover demasiado.

Añadid la mezcla inicial y mezcladlo todo.

Tenéis que procurar hacer movimientos que rodeen la mezcla, para evitar rebajarlo en exceso.

Es mejor utilizar una pala de madera que una varilla.

Finalmente, os tiene que quedar una mezcla como esta.

Cremosa sobre todo.

Con eso rellenaremos nuestro molde que tenemos preparado con la base de bizcocho.

Con una paletina, alisaremos la parte superior.

Nos tiene que quedar nivelado.

Muy bien.

Y ya podemos poner nuestro semifrío en la nevera. Allí lo tendremos un par de horas mínimo. También lo podéis poner en el congelador durante una hora.

Pasado este tiempo, y con la ayuda de un cuchillo, separaremos el semifrío del molde de hierro.

Con cuidado de no estropear el pastel.

Y ya lo tenemos desmoldado. Cuidado, que necesitará más horas de frío y la estabilidad no será la mejor, pero suficiente para decorarlo y acabar la receta.

Con la nata que hemos reservado antes llenaremos una manga pastelera.

Y decoramos a nuestro gusto.

Yo he hecho dos pasteles con decoraciones diferentes.

Un poco de turrón desmenuzado por encima.

Con mucho cuidado, y con una paletina, podréis mover el pastel a un cartón y blonda.

Ya para acabar, un poco de almendra hilada y tostada aportará un toque de color.

Suficiente.

Y ya lo podemos reservar a la nevera unas 3 o 4 horas antes de consumir.

Lo podéis congelar también y sacarlo una hora antes de servirlo.

Es un pastel muy sabroso y ligero en boca.

¿Lo queréis probar?

Cortemos una porción.

La podéis acompañar de más nata o de un poco de coca de yogur con salsa de frambuesas. I un buen cava, por su puesto. ¡Buen provecho!