¡Ah!.. ¿qué tenéis invitados a comer?... haced unas tartaletas de crema que no fallan nunca. La crema pastelera acostumbra a gustar mucho, aunque no a todo el mundo. Un postre que lleve crema quemada... siempre entra por la vista... y se nos hace la boca agua.
Lo mismo pasa con el chocolate. Son de aquellas debilidades que tiene el ser humano. Os explicaré como, de forma muy sencilla, podéis hacer un postre muy "resultón". No os perdáis la receta de "Tartaletas de crema con fruta y chocolate". ¡Vamos!
(para 12 tartaletas)
1 plancha de pasta brisa
crema pastelera (receta de medio litro de leche)
gelatina en frío
fruta variada
decoración al gusto
Tendremos que tener hecha la crema con antelación (una hora como mínimo). Encontraréis la receta en esta página. A continuación, cogeremos una plancha de pasta brisa y el molde adecuado.
Cortaremos redondas que encajen con la medida de nuestro molde.
Y forramos el molde con paciencia.
Sacamos la crema de la nevera que ya la teníamos hecha previamente. La removemos un poco.
Ahora llenaremos las tartaletas con crema pero solamente hasta la mitad. Después veréis por qué.
Genial, preparamos el horno...
... a 190 grados... unos 15-20 minutos... hasta que veáis que la pasta brisa está cocida (oscura).
Mientras se cuecen, iremos preparando el resto de ingredientes. Hoy utilizaré una gelatina de pastelería en frío. No se tiene que calentar. Solamente se tiene que untar directamente.
Está bastante bien, por qué el tarro es de medio kilo...
... y después se puede tapar y conservar en la nevera.
Como siempre, lo he comprado a mi distribuidor de productos pasteleros habitual.
... ¿un truco?... con un vaso que tenga la medida de las tartaletas apretáis los "petit-fours" y los haréis más grandes.
Parece que ya las tenemos cocidas.
Veréis que son muy fáciles de desmoldar.
La tartaleta cabe perfectamente en nuestros "petit-fours".
Ya tienen buena pinta...
... pero ahora las tenemos que decorar.
Lo prepararemos todo... y esperamos a que estén frías las tartaletas.
En este momento, acabaremos de llenar la tartaleta con crema pastelera.
Y ahora sólo tenéis que poner fruta por encima y pintarlas con gelatina. Pero os explicaré lo que me ha pasado. Yo no estoy exento de encontrarme con problemas y tampoco se tienen que esconder. La realidad siempre es caprichosa.
Resulta que he comprado unas frutas rojas congeladas, ya que son frutas difíciles de encontrar. Pues bien, al estar congeladas... llevan mucha agua. A pesar de estar totalmente descongeladas... al tener contacto con la crema... han empezado a chorrear el colorante natural que tienen... y claro, la presentación queda horrorosa. Tenemos que saber rectificar a tiempo y encontrar soluciones alternativas. Total, que he descartado el uso de las frutos rojos. Eso no pasa si son frutas naturales.
¡Fuas, qué pinta!
Las iremos colocando en "petit-fours"...
... para poder servirlas juntas...
¿Molan, eh?
He dejado estas con un solo fruto rojo y un poco de crocante (para tapar la decoloración).
Y otras las haremos con granillo de chocolate. Estas eran las que habían "teñido" tanto. Tranquilos, los invitados ni lo notarán, je, je.
Decoramos con una hoja de menta.
Las de crema las podemos servir con un "barquillo" de esos que venden o con medio barquillo.
Y las de chocolate, las decoraré con un "barquillo" de chocolate y un poco de cacao en polvo.
Total, que han quedado fabulosas, chicos.
Servidlas con un buen cava super fresquito. De cara al próximo verano, cuando sea temporada de frutos rojos, haré... con fresas, kiwi, piña, etc... ¡Buen Provecho!